En Argentina representa el 13% del total de los tumores en ambos sexos. Recomiendan consultar al médico ante síntomas, como sangrado o cambios en la forma habitual de evacuar el intestino, dolores abdominales o rectales frecuentes, anemia o pérdida de peso.
El Grupo de Trabajo del Servicios Preventivos de Estados Unidos, un equipo de especialistas independientes en prevención de enfermedades, recomendó por primera vez adelantar a los 45 años la edad para comenzar a realizarse estudios que permitan la detección del cáncer colorrectal, que en la actualidad están indicados a partir de los 50.
«Por primera vez, el Grupo de Trabajo recomienda que las pruebas de detección comiencen a los 45 años», señala un comunicado emitido por el Grupo de Trabajo del Servicios Preventivos de Estados Unidos (Uspstf) que adelantó de esta manera el borrador de la recomendación que se encuentran elaborando.
El documento fue subido a la página www.uspreventiveservicestaskforce.org/ y se encuentra abierto a recibir comentarios hasta el 23 de noviembre para efectuar la recomendación definitiva.
No obstante, los especialistas advirtieron inmediatamente que «se sigue recomendando encarecidamente evaluar a las personas de 50 a 75 años» en tanto que «para los adultos de 76 a 85 años» la sugerencia es que la decisión de indicar estudios «se tome de forma individual».
Tercera causa
Los expertos recordaron que en Estados Unidos el cáncer colorrectal es la tercera causa de muerte y que «a pesar de la sólida evidencia de que la detección del cáncer colorrectal es eficaz, aproximadamente una cuarta parte de las personas de 50 a 75 años nunca se han realizado».
«Esperamos que esta recomendación de realizar pruebas de detección de cáncer colorrectal en personas de entre 45 y 75 años fomente más pruebas de detección y reduzca el riesgo de que las personas mueran a causa de esta enfermedad», sostuvo el presidente del Uspstf, Alex Krist.
Según informa la Organización Mundial de la Salud, «el cáncer colorrectal se puede detectar en etapas tempranas pues se origina a partir de lesiones precursoras no malignas que se pueden identificar mediante programas de tamizaje de base poblacional».
Las pruebas incluyen el examen de sangre oculta en las heces, la sigmoidoscopia (que permite analizar el ano y la última parte del intestino grueso) y la colonoscopia (que permite estudiar todo el intestino grueso).
Detección temprana
La detección temprana es clave en este tipo de cáncer porque las posibilidades de curación en estos casos son superiores al 90% y los tratamientos son menos invasivos.
El organismo internacional señaló que «aunque las guías de tamizaje para cáncer colorrectal varían en cada país, la recomendación general es empezar el tamizaje en la población de riesgo medio, a partir de los 50 años y continuar a intervalos regulares hasta los 75 años».
En Argentina, según las estimaciones de incidencia del Observatorio Global de Cáncer de la OMS citada por el Instituto Nacional del Cáncer como último dato, se estimó que en 2018 se diagnosticaron 15.692 casos nuevos de cáncer colorrectal y que este representa el 13% del total de los tumores en ambos sexos.
El Ministerio de Salud de la Nación recomienda consultar al médico ante síntomas, como sangrado o cambios en la forma habitual de evacuar el intestino, dolores abdominales o rectales frecuentes, anemia o pérdida de peso.
También hay que consultar en caso de tener colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn (sin importar tu edad) y si se tienen familiares cercanos (padres, hermanos o hijos) que han tenido cáncer colorrectal o pólipos adenomatosos (sin importar la edad).
Finalmente, se recomienda realizar los estudios entre 50 y 75 años aunque no se presenten síntomas ni antecedentes familiares.