Despidos estatales en Mar del Plata: Hogares sacudidos por la inestabilidad económica. La demanda de liquidez se agudiza mientras los salarios no cubren las necesidades básicas. ¿Qué pasa cuando ya no hay salario? La preocupación crece ante cerca de 150 despidos en la ciudad y la incertidumbre sobre el futuro laboral.

Por Natalia Muñoz

Muchos hogares ven su estabilidad sacudida. Tal vez como nunca antes, tal vez por primera vez. La demanda de liquidez es cada vez mayor y más inmediata, incluso para obtener menos bienes y servicios. En criollo: la plata está alcanzando para cada vez menos. Salvo algunos gremios, los salarios no alcanzan a satisfacer las necesidades de un estilo de vida que no para de achicarse. Pero, ¿qué pasa cuando ya no hay salario? ¿Qué pasa con la calidad de vida cuando te dejan sin trabajo?

Un día no podés ingresar más al sistema porque te dieron de baja; abrís la puerta en pijama y es el cartero con el telegrama de despido; o recibís un whatsapp, así, sin más, avisándote que mañana no vayas. ¿Qué es lo que sucede cuando no podés entrar a tu lugar de trabajo porque hay policía armada en la puerta bloqueando el paso? ¿Qué gana en la cabeza en esos momentos de epifanía, la plata, la humillación, el enojo, o el ensordecedor “y ahora, ¿qué?”?

Argentina cerró la primera semana de abril con casi 15.000 despidos en diversas dependencias estatales. En Mar del Plata, ya son cerca de 150, y contando.

A decir verdad, hablar de despidos no es 100% acertado para lo que está sucediendo. Algunos sí, efectivamente han sido desvinculados. Pero en muchos otros casos se trata de finalizaciones de contratos y avisos de que no serán renovados. Es con esa nomenclatura que aún se habilita cierto juego lingüístico y legal: técnicamente no son despidos, sino que se hizo uso del derecho a no renovar contratos.

Desempleo y desamparo

Asiste cierta razón, mas el resultado empírico es el mismo: de un día para el otro, hay casi 150 familias que se quedaron sin ingresos en Mar del Plata, que se aglutinan con el ya alto índice de desempleo, trágico ranking que nos mantiene líderes en el país.

Y a todo esto, se suma un ruido anterior. Dentro del tan aclamado “tenemos que hacer autocrítica” de la ahora oposición nacional, ¿qué lugar ocupa, precisamente, haber llegado a esta instancia con puestos laborales esenciales precarizados, con contrato, sin pase a planta permanente? El desamparo de un trabajador no se teje solo ni en un día.

Es menester resaltar otro factor dentro de esta ola de despidos: no hay a quien reclamarle. “Acá no hay autoridades, y esto no es una casualidad. Esto es una decisión política, es una estrategia de decir ‘no pongamos a nadie’”, comentó a este medio Ezequiel Navarro, secretario general de la CTA Autónoma en Mar del Plata y secretario adjunto de ATE, también local. 

Desde ATE, precisamente, a fines de marzo solicitaron al intendente Guillermo Montenegro su intervención y declaración ante la intrépida pérdida de puestos de trabajo. Ese pedido fue repetido en los primeros días de abril. Un encuentro entre las partes para aunar esfuerzos e intentar contener la situación. Al momento de esta redacción, la petición no había sido respondida por el Ejecutivo.

Algunas declaraciones

Es decir, no se respondió al sindicato que nuclea a los trabajadores estatales, pero sí hubo declaraciones del jefe comunal al respecto. El viernes 5 de abril se realizó la primera de una serie de conferencias de prensa semanales que comenzarán a brindar desde el Municipio. “En estos momentos complejos, es muy importante que los vecinos de Mar del Plata y Batán tengan certidumbre de lo que está realizando y qué es lo que está haciendo el gobierno municipal”, explicó Montenegro al inicio de su alocución.

Pero no fue sino hasta el final, y ante la pregunta de una periodista, que el intendente se refirió al tema. Brevemente, respondió que no están los despidos en el estado dentro del temario de diálogo diario con el gobierno nacional. “Me parecería una falta de respeto, es un tema que tiene que manejar el Gobierno nacional”, agregó.

Discusiones sin definiciones

La discusión entre los referentes no pareciera tener un punto final cercano. Las vociferaciones del público en general tampoco parecieran tener un plan de calma inmediata. Leer comentarios en redes sociales de los medios que publican sobre las cesantías en el estado es algo cercano a un deporte de riesgo. Por eso la propuesta de este escrito es, más bien, dimensionar qué significa a la ciudadanía no contar más con atención y servicios en oficinas como ANSES, el Ministerio de Trabajo o el INIDEP.

Por estas horas se habla de la posible reincorporación de 10 de las 35 personas desvinculadas del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP). Lo cierto es que, sin la totalidad de trabajadores, hay campañas ya programadas que no comenzarán. Según informaron, esas campañas están relacionadas con el “manejo adecuado de los recursos pesqueros, la conservación del ambiente marino”, más la defensa de la soberanía marítima y sus recursos.

El cierre de la oficina de ANSES en el sudoeste de la ciudad, junto al Hospital Interzonal General de Agudos, que atendía unos 300 reclamos por día, implica que las familias ahora deban hacer sus trámites -algunos mensuales- en otras dependencias que continúan abiertas. No solo el tiempo, sino la movilidad vuelve a ser influyente. En caso, una persona ahora debe gastar $1500 pesos en colectivo para llegar a otra oficina pública. Eso, si cuenta con quién dejar a las infancias de la familia.

El Ministerio de Trabajo presenta una alarma particular. Se vaciaron áreas que se encargaban de auditar el estado regular del empleo privado y las sanciones que correspondieran en cada caso. “Hoy el estatal tiene miedo, pero no me quiero imaginar el privado”, ilustró Navarro. Desvincularon al personal que recibía reclamos y hacia gestiones por empleo no registrado, explotación laboral, falta de pago de haberes o de aportes, por ejemplo.

En conclusión, el vuelco masivo de marplatenses hacia el desempleo parece solamente haber empezado. Desde el gobierno de Javier Milei ya adelantaron que el objetivo es llegar a los 70.000 despidos en total. Solo resta ver cuántos de ellos serán en nuestra ciudad.

En tanto, el mapa de bajas laborales en oficinas estatales es, hasta el cierre de la primera semana de abril, el siguiente:

• Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero – INIDEP: 35
• ANSES: 26
• Ente Nacional de Comunicaciones – ENACOM: 17
• Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia – SENAF (UNZUÉ): 16
• Hoteles de la Armada: 16
• Ministerio de Trabajo: 13
• Centro de Referencia (Min. Capital Humano): 5
• CONICET: 3
• Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo – INADI: 2
• Seguridad Vial: 2
• Base Naval: 2
• Unidad Turística Fiscal Chapadmalal: 1