Muchas manos, un solo objetivo: que los residuos reciclables vuelvan al sistema productivo.

Por Melisa Morini

Seis años hace que vecinos y vecinas de Chapadmalal llevan adelante Espacio Consciente, una propuesta efectiva y realmente circular que posibilita que los residuos sólidos reciclables sean transformados en nuevos productos o materias primas.

Una red de acopio y gestión de un problema enorme que como sociedad cuesta enfrentar con el compromiso que merece, qué hacer con los residuos sólidos que generamos para que vuelvan al sistema.

“Lo que hacemos es básicamente ser un punto de acopio de residuos sólidos reciclables donde recibimos lo que se genera en los hogares y los vecinos traen para separar, organizar y luego gestionar con otras organizaciones o empresas que retiran lo que vuelven a utilizar”. 

• ¿Y funciona?
•  Funciona perfecto.

Ana Rey es parte del equipo de voluntarios que hacen Espacio Consciente y medio con organizaciones que permiten que la rueda ande y que la basura se recupere y se transforme. Ana es parte de una red vecinal menester para que las condiciones del barrio que conoció se mantengan. Por lo menos las posibles.

“Es un proyecto colectivo, autogestivo y voluntario. Así se fueron gestando los cinco Eco Puntos que hoy tenemos en Chapadmalal. Tocando puertas, charlando y uniendo voluntades, hay un referente por Eco punto que cumple con el rol de asesorar al vecino, recibir y clasificar el desecho para su posterior retiro y vuelta al sistema productivo”.

Los Eco Puntos se distribuyen de la siguiente manera, Espacio Consciente funciona en Calle 0 y 11, en Los Lobos, en el CPA de La Estafeta, en el espacio cultural Abuela Beba y en la Sociedad de Fomento Barrio San Eduardo, de norte a sur respectivamente.

Esta organización vecinal no se encarga únicamente de resolver qué hacer con el residuo una vez generado sino de ir a la raíz del problema y focalizar en el consumo. Brindan talleres sobre reciclado, dan charlas en escuelas y organizaciones, articulan con el sector público, con las organizaciones sociales y con los privados. Un caminito de hormiga que se fue logrando con mucha garra y corazón. 

Chapa tiene además otro problema que da pie a la acción: una escasa recolección de basura. El camión no pasa por todos los domicilios ni lo hace diariamente. Aunque haya ampliado el recorrido, la región creció más rápido que los servicios disponibles.

“Se trata de contar también que Chapadmalal es un lugar hermoso con una gente maravillosa que cuida los espacios públicos y el entorno natural y que si bien crece todos los días queremos que sepan los vecinos y los turistas que existe este trabajo y que se lo apropien para mantenerlo”.

Comunitario, público y privado

Ser consciente de la basura que generamos es el primer paso, el segundo es la separación en casa, para los vecinos de Chapadmalal la tercera es trasladarlos hacia los puntos de acopio y la que generalmente se desconoce es lo que pasa después. ¿Cómo vuelve la basura a ser parte del sistema productivo?

Manos cartoneras se encargan de una parte importantísima. Las cooperativas de cartoneras y cartoneros nucleados en el MTE garantizan recolección semanal de estos desechos para su posterior transformación. “Una vez a la semana pasan a recoger lo recolectado en los puntos de acopio, creamos una hoja de ruta y en temporada incluso pasan por locales comerciales que generan mucho residuo que puede reutilizarse asique directamente los pasan a buscar, está garantizada esa recolección y desde el primer momento contamos con ellos”. 

Un trabajo articulado

Por otro lado, la articulación con la Municipalidad también es buena. “Fue desde el hacer que nos vinculamos con el EMSUR, vieron que el laburo que hacíamos era sostenido, organizado, prolijo y ahora cuando necesitamos que lleguen a retirar lo juntado en una limpieza de playas, por ejemplo, ellos llegan a ser esa parte del engranaje”.

Según relata Ana, “este año la parte de ambiente de la municipalidad nos dio las campanas para que sean usadas en eventos, jornadas, etc. si existen eventos que se hagan al aire libre pueden pedirnos estos recursos para instalar y que la basura producida sea conscientemente separada para crear el hábito, nos confiaron esa herramienta pública”.

Empresas privadas también forman parte de esta red de voluntades. RBA es una empresa que recolecta el aceite usado para hacer biodisel. Los tachos para llevar el aceite que ya no usamos en casa puede acercarse a los Eco puntos públicos como el de Los Lobos o el CPA. 

La cultura que todo lo envuelve

El trabajo de Espacio Consciente es “acción pura y voluntaria, siempre somos más”, como dice Ana, sin embargo, puntualiza que “hay mucho para hacer” y la pata cultural hoy es importante para este grupo de vecinos organizados.

Cultura y Sustentabilidad nace de la mano de la reconocida banda folclórica de la zona, Los Shinkaleros, que aportan juntadas, festivales, jornadas de música y arte donde se difunda una manera de hacerlo organizada y coherente con lo que predican: qué producimos, qué vendemos, qué ofertamos, cómo lo hacemos. 

“La última Teleseada no dejó residuos plásticos de un solo uso, no produjo basura que no pueda volver al sistema y contamos con la visibilidad que le dio Espacio Consciente a la problemática ubicando cestos correspondientes e indicando cómo descartar lo que consideramos basura”, contó el cantante de la banda, Marcelo Lorenzoni.