20.7 C
Mar del Plata, AR
noviembre 21, 2024
Capilla de Santa Cecilia
Lo de Acá

Capilla Santa Cecilia: un ícono desde la fundación de Mar del Plata

Construida en la previa de la legalización del poblado de Mar del Plata, la capilla celebra 150 años. Monumento Nacional desde 1971, tiene un gran valor cultural e histórico para la ciudad.

 

Por Agustín Casa

Se cumplen 150 años de la fundación de la Capilla Santa Cecilia (Córdoba 1338), que se terminó de construir en 1873, y este 22 de noviembre se celebra su aniversario en el Día de Santa Cecilia, patrona de Mar del Plata. 

Desde la ubicación de la capilla en la loma fundacional de la ciudad -que recibe el mismo nombre- se comenzó a diagramar el trazado del poblado de Mar del Plata, que se legalizó el 10 de febrero de 1874.

Las características de la capilla

“La capilla fundacional Santa Cecilia tiene una arquitectura sencilla, de líneas neoclásicas simples y poca ornamentación”, señala a Bacap la arquitecta Analía Benítez, magíster en Gestión del Patrimonio Urbano arquitectónico, docente e investigadora de la UNMDP en el grupo de Estudios Histórico-Culturales y Patrimoniales del Instituto de Estudios de Historia Patrimonio y Cultura Material (IEHPAC) e integrante de la Comisión Diocesana de Bienes Culturales.

La especialista remarca que “los elementos neoclásicos podemos encontrarlos principalmente en la fachada: posee un frontis triangular con óculo, accesos con arcos de medio punto, está elevada sobre escalinatas, y tiene una pequeña cúpula con linterna donde se aloja el campanario”.

“Habitualmente en los templos con tres puertas frontales, cada puerta conduce a una nave, la central y las naves laterales -continúa Benítez-; pero en este caso, una particularidad del diseño de esta capilla es que las dos puertas laterales confluyen en una nave única y la puerta central no tiene comunicación con el interior. Esta puerta central conduce al Bautisterio, un espacio reducido completamente independiente, que evoca la tradición de que el bautisterio tuviera un edificio separado del resto del templo”.

Asimismo, la arquitecta resalta que “en su origen, la capilla era exenta, es decir, tenía un perímetro libre y ventanas sobre cada lateral” y que “cuando en 1902 es cedida a las Hermanas del Huerto, y se crea el colegio, los nuevos edificios se pegan a ella y pierde la condición exenta”. 

La capilla en 1873. Foto de la colección de Julio César Gascón. Gentileza de Angel J. Somma. Crédito: fotos viejas de Mar del Plata.

Elementos de su época 

Según Benítez, en la capilla se pueden observar elementos correspondientes a dos momentos: al período de Patricio Peralta Ramos y al de su hijo Eduardo, quien realizó una remodelación hacia 1915.

“De los primeros tiempos, se conserva un sector de piso original, que se dejó a la vista luego de la restauración de los años 90, mientras que el piso que puede apreciarse actualmente es el colocado por Eduardo. También en esta reforma de 1915 se incorpora el cuadro de Erulo Eroli, pintor italiano, que se encuentra suspendido del cielorraso. Representa la coronación de Santa Cecilia y su esposo Valeriano, mártires en tiempos de la persecución de los cristianos en el Imperio romano”, describe la docente e investigadora.

Al mismo tiempo, comenta que “el retablo se considera construido por el propio don Patricio con cajones y otros elementos, aunque ha sufrido intervenciones posteriores, mientras que el armonio alemán de 1914, que está en funcionamiento, se corresponde a la reforma de su hijo”.

Un ícono de la ciudad y el país

Benítez destaca que la Capilla Santa Cecilia “tiene valor arquitectónico y artístico, pero más aún histórico y social” y asegura que “es la memoria de los primeros tiempos de la ciudad de Mar del Plata y testigo de su evolución”. 

“Al ser el único edificio religioso de los primeros tiempos, fue centro de atracción de los pobladores del caserío portuario y los establecimientos rurales cercanos. Resultan de especial interés los acontecimientos sociales que se realizaban, casamientos, bautismos en el bautisterio exterior, entierros en el cementerio aledaño, procesiones y toda actividad festiva comunitaria”, relata la arquitecta.

Por su valor histórico y cultural, la capilla no solo es considerada patrimonio arquitectónico marplatense, sino que en 1971 fue declarada Monumento Histórico Nacional.

Capilla fundacional de Mar del Plata

El historiador Daniel Reynoso narra que la Capilla Santa Cecilia se construyó tiempo después de la muerte de Cecilia Robles, esposa de Peralta Ramos, quien falleció en 1865. “Peralta Ramos decidió levantar esta capilla en su memoria”, indica y añade que la construcción se realizó “en el lugar más notorio de esa geografía, que era la loma de Santa Cecilia” y que terminó de construirse en 1873.

En aquel momento, este sector costero pertenecía al partido de Balcarce. En este sentido, Reynoso comenta que ha tenido contacto con referentes de la Parroquia de San José de Balcarce y que “figuraba que en ese momento el partido de Balcarce contaba con dos iglesias, y esto era porque había una que había comenzado a construirse en el partido de Balcarce en la zona costera y otra que es la Parroquia de San José de Balcarce en la zona serrana”.

En cuanto al valor histórico de la Capilla Santa Cecilia, Reynoso recuerda que la iglesia está presente en el acta de pedido que hace Patricio Peralta Ramos al Gobierno de Buenos Aires para la fundación del poblado.

“Dice que no solamente hay un número de casas, un saladero, un puerto, sino que también hay una iglesia de piedra y cal”, afirma Reynoso, quien integra el Grupo de Historia Social Argentina del Centro de Estudios Históricos (CEHis) de la Facultad de Humanidades de la UNMDP. Además, agrega que “hasta que se construyó la Catedral de Los Santos Pedro y Cecilia fue el núcleo central de toda la actividad religiosa y de toda la actividad civil, que debía congregar hasta el inicio del siglo 20 a la población de la ciudad”.

Por su parte, Benítez también sostiene que “como en su origen era el único edificio en este punto elevado del territorio, servía de referencia para pobladores y viajeros, por eso, y por ser una obra firme, bien construida para la época, el agrimensor Chapeaurouge la tomó como punto de inicio para el trazado de las calles del pueblo”.

“Lo más importante es que, a partir de lo que eran sus dimensiones y donde está ubicada, es donde comenzó a hacerse el trazado del poblado. Eso está todavía en una placa que existe en la esquina de Córdoba y 9 de julio, donde está el Colegio Santa Cecilia, que dice que a partir de ahí es donde se tomaron las medidas contando las 100 varas, que son 86 metros, la separación de las calles y, a partir de ahí, sucesivamente una cuadrícula que dé un cierto ordenamiento a lo que era pensado como el poblado”, concluye Reynoso.

 

Foto principal: Diócesis de Mar del Plata.

 

Últimas Notas

¿Cuáles son las obras nominadas a los Estrella de Mar?

redaccion

Imperdibles propuestas de San Valentín en Mar del Plata

Hugo

Municipalización de Mogotes: la historia de una deuda

Thomas