Mariana Castro es profesora en Letras y recomienda lecturas, realiza talleres de escritura e intercambio de experiencias, todo a través de su Instagram.
Por Celeste Valeria Verdicchio
Mariana Castro es profesora en Letras egresada por la Universidad Nacional de Mar del Plata. Actualmente, se dedica a dar clases en distintas escuelas secundarias y realiza contenido en forma activa para su cuenta de Instagram Hecha de Palabras. A través de recomendaciones de lectura, talleres de escritura e intercambios de experiencias entre lectores, Mariana supo construir una comunidad más que enriquecedora. Además, es organizadora de un club de lectura mensual gratuito, en el que propone un determinado libro y luego se debate entre los participantes. El club de lectura es una experiencia fabulosa, a la que han sumado su presencialidad autores reconocidos como Martín Kohan, Dolores Reyes, Agustina Bazterrica, por solo mencionar algunos.
– Sos profesora en Letras y te dedicás a dar clases en escuelas secundarias. Además, trabajás arduamente en tu cuenta de Instagram Hecha de Palabras, en la que se nota la calidad de tu contenido y las actividades propuestas. ¿Cómo definirías un típico día laboral tuyo?
– Cuando una es docente y además trabaja de manera independiente y generando contenido a través de las redes sociales, es difícil delimitar una rutina laboral, más en este contexto de pandemia y aislamiento que estamos atravesando. Por lo general, divido el día más o menos en franjas horarias: por la mañana me dedico a los colegios y más hacia a la tarde me tomo un descanso, ya sea para almorzar o para realizar alguna actividad al aire libre, ahora que se puede. Posteriormente, me pongo a trabajar en los talleres de escritura, a repasar los encuentros, a revisar los textos que escribieron los participantes y luego por la tarde noche ya tengo los encuentros. Pero, lo que decía antes, el trabajo en redes o generar contenido es un trabajo que demanda mucho tiempo, que parece que no, o que desde afuera las personas que lo consumen les parece que es una cuestión de segundos. Yo me lo tomo con responsabilidad, la realidad es que lleva mucho tiempo.
Las redes como nexo
– ¿Cuál fue el objetivo principal de la creación de Hecha de Palabras? ¿Creés que fue mutando a lo largo del tiempo?
– Hecha de palabras en un principio era mi perfil personal. Poco a poco, me fui dando cuenta que las redes me interesaban como nexo para transmitir contenido, para intercambiar contenidos, prácticas literarias y recomendaciones de lectura. Además, lo que me dio la seguridad para hacerlo fue mi propia formación, conocimiento y trayectoria. Sentí que podía aportar algo al ámbito literario y a las comunidades lectoras de internet. Entonces, el objetivo fue ese: crear un espacio de calidad para hablar de libros, lectura, escritura y mediación.
– A través de tus talleres de lectura y escritura, como también el club mensual de lectura al que asisten autores y autoras reconocidos, ¿creés que se abren espacios de interacción entre las personas que de otra forma no serían posibles?
– Sí, claramente. Creo que las redes sociales y todos los espacios que habilitan internet generan muchos intercambios entre lectores y entre personas que escriben. Las comunidades lectoras han crecido muchísimo y, más allá de ciertas aplicaciones que están creadas específicamente para hablar de libros o para recomendar lecturas, considero que a través de Instagram, YouTube u otras redes sociales, se han creado y se siguen creando y enriqueciendo muchas comunidades para hablar de libros. Y esto resulta interesante porque nos permite tener el conocimiento al alcance de la mano, estar todo el tiempo con acceso a recomendaciones de lectura. Además, la lectura, creo yo, no es algo que se pueda imponer sino, por el contrario, es algo que se debe contagiar. En este sentido, estoy en contacto con muchas personas que me han comentado que en la cuarentena han empezado a leer más. Quizás no por el tiempo libre, sino por estas comunidades de lectura y de lectores que se han creado principalmente para eso: contagiar. Y si, además, podemos sumar algo nosotros desde nuestra formación, e invitar a que esas lecturas sean cada vez más profundas y de mejor calidad, me parece algo súper enriquecedor. Quizás en otro contexto, fuera de las redes, las personas tienen que dirigirse o investigar por sus propios medios dónde hay un club de lectura, dónde hay un círculo de lectores o alguna actividad específica y quizás está menos al alcance de todes.
Cada vez son más las personas que se suman al club de lectura organizado por Mariana.
Aprovechar los recursos de internet
– En un momento crucial de nuestra historia, al que muchos llaman La Cuarta Revolución Industrial o Era de la Información, cada vez es mayor el tiempo que pasamos frente a las pantallas pero también leyendo. ¿Qué opinás al respecto? ¿Te definirías con una postura apocalíptica o integrada?
– Con respecto a la tecnología y a la lectura en pantalla, no me considero ni apocalíptica ni integrada. Me parece que lo interesante es la construcción de un punto medio. Creo que hoy no se lee menos que antes, no hay que ser alarmistas frente a la tecnología. Como decíamos anteriormente, estas herramientas nos permiten un montón de acercamientos a cuestiones culturales, a contenidos culturales, que antes no sucedían o que simplemente terminaban por excluir a muchas personas que no pertenecían a ese tipo de círculos en particular. Así que, creo que hay muchas ventajas pero también no podemos dejar de ver que existe una fuerte presencia de la lógica mercantil. Una lógica predispuesta por los algoritmos, que nos llevan a demandar mayor velocidad, mayor nivel de consumo. Pero, también hay que entender que hay muchas personas que quizás por momentos nos gusta leer en profundidad, establecer vínculos, armar recorridos y comprender conceptos a partir de la lectura, aunque haya otras lecturas que habiliten un acercamiento mucho más veloz o quizás de superficie. Entonces, me parece que no hay que ser ni apocalíptico ni integrado, sino saber aprovechar las estrategias o, mejor dicho, los recursos que internet y las pantallas nos brindan. Sobre todo, para tratar de no perder la calidad de los consumos culturales que tenemos y de las lecturas.
– ¿Qué es y qué significa la lectura?
– La lectura, para mí, es mucho más que decodificar palabras. Yo creo y estoy convencida que leemos libros y leemos textos, pero también leemos el mundo: leemos a las personas, leemos las acciones y leemos los acontecimientos históricos. Sin ir más lejos, acabamos de vivir en estos días un acontecimiento histórico con la muerte de Maradona. Considero que, como lectores, debemos aprender a leer cada vez más y mejor el mundo. En este sentido, me parece que la lectura es eso: poder observar, poder mantener el silencio por momentos y también poder estar atento a todo lo que recibimos, a todo aquello que se nos presenta frente a los ojos. También, leer entre líneas: establecer vínculos, levantar la cabeza, pensar, saber leer con todo lo que vivimos, con todo aquello que leímos, conocemos y que nos han contado.
Creo en la lectura como un hecho, que comienza en lo individual, se enriquece en lo colectivo y nos hace mejores.