Las lecturas que elegimos muchas veces están influenciadas por diferentes factores, pero uno de los más importantes es el clima. Las estaciones despiertan ciertos gustos literarios en los lectores, en especial el verano. No sé si será por el calor, la idea de vacaciones, sol y playa, o imaginarse uno mismo en el calmo y fresco mar de la costa, pero en esta época siempre está el pedido de “libros de verano, para la playa”
Y como actualmente nos encontramos en esta adorable (sarcasmo) estación, pensé que sería buena idea recomendar algunos libros que transcurren en verano, no necesariamente hay playas o romance, pero esa no es siempre la esencia que caracteriza estas fechas.
Los seis seleccionados son:
No te enamores de Rosa Santos – Nina Moreno – VR Editoras / VRYA
Todos saben que las mujeres Santos están malditas. La mala suerte y la desgracia las siguen. Si te enamoras de una de ellas, están destinadas a llorarte en los muelles con la vista perdida en el mar. Rosa sabe esto, y es por eso que siempre tuvo miedo a enamorarse. Pero ese verano conoce a Alex, un joven marinero que puede llegar a cambiar todo en su vida.
Una historia fresca, llena de romance, y un toque de magia que la hace especial. La historia de las mujeres Santos es fascinante. Este libro no es solo sobre una maldición, cómo romperla y el triunfo del amor, sino que gran parte es sobre la herencia familiar, los lazos que nos unen, y cómo nos relacionamos.
Éramos mentirosos – E. Lockhart – Penguin Random House / Salamandra
Los Sinclair son una de las familias más ricas e influyentes de Nueva Inglaterra, y no temen mostrarlo. La avaricia y la ostentación están a la orden del día entre sus miembros. Poseen una isla privada en donde pasan todos los veranos juntos. Candence, la protagonista, amaba esos veranos porque era la oportunidad de pasar tiempo con sus primos, Johnny y Mirren, y con su amigo, Gat. Pero luego de un accidente que sufrió hace dos años, el cual le provocó una terrible amnesia, esos veranos se terminaron. Candence está decidida a ver a sus amigos de nuevo, y a tratar de descubrir qué ocurrió aquel verano.
Una historia veraniega distinta, en donde el misterio y los secretos son la parte fundamental del libro.
Amor de verano – Jazmín Riera – Planeta
Lina pasa sus veranos junto a su familia, y otras dos, en varias ciudades de la costa Argentina, pero el verano en el que transcurre la historia se reúnen en Mar del Plata. Los adultos se llevan a la perfección y creen que los jóvenes también. Sin embargo, como en toda buena novela para adolescentes, tenemos nuestra cuota de drama juvenil.
Hace dos veranos que Shep, el crush de toda la vida de Lina, no pasa las vacaciones con ellos. Desde chicos que son amigos, y su amistad se fue fortaleciendo con los años, creando un vínculo muy especial. Pero ese verano, Shep regresa y ya no es un niño, tiene 18 años y ella 16, y su relación está a punto de cambiar…
Este libro es todo lo que se espera de una novela veraniega romántica. No es demasiado larga, se lee rápido porque la historia es atractiva y atrapante, y el romance lo es todo. La autora sabe muy bien cómo jugar con las emociones de sus personajes y sus lectores.
La historia de Carolina comienza cuando debe viajar a Italia tras la muerte de su madre. Una vez ahí, llega a sus manos el diario que su mamá llevaba cuando era joven. A través de sus palabras, irá recorriendo las calles de Italia y conociendo facetas de su madre que no esperaba.
El libro alterna entre presente, narrado por Carolina, y pasado, con las entradas del diario de Heady, su madre, cuando tenía 18 años y estaba en Italia. El diario es lo que une a la historia y a ambas protagonistas, y nos permite conocer Italia de una forma emotiva, sincera y bellísima.
Obviamente tenemos romance y mucho helado, como corresponde. Pero en sí, es una historia sobre el duelo, el peso de las palabras, y las emociones. Una lectura ligera, pero no tan sencilla como aparenta.
Una Sonata de Verano – Belén Martínez – Ediciones Urano / Puck
Casio está obsesionado con el libro “Preludio de Invierno”, y junto a su familia y amigos había organizado unas vacaciones de verano en el pueblo donde transcurre la historia. Sin embargo, unos meses antes, algo ocurre en su vida que hace que esos planes cambien un poco. Va a Aguablanca. pero no con toda su familia y amigos. Su vida se ha vuelto una pesadilla y espera que estar en el lugar donde nacieron sus personajes preferidos le devuelva un poco de estabilidad.
Lo que encontró allí, quizá no era lo que buscaba, pero sí lo que necesitaba. Una historia cargada de emociones profundas, difíciles de digerir pero que la autora, con una pluma magistral, logra hacer de lo más llevadera.
El verano en que me enamoré – Jenny Han – Planeta / Destino
Belly siempre pasa los veranos en la casa de playa de la mejor amiga de su mamá, junto a su hermano y a los dos hijos de ella. Nunca se sintió muy incluída en el grupo de chicos, ya que era la menor y mujer, pero el verano en el que transcurre la historia eso cambia. Belly ya no es más una nena, sino una adolescente de 15 años que ha crecido y ahora los chicos la miran de otra forma, y es invitada a fiestas privadas. Todo lo que siempre quiso.
Pero pronto se da cuenta que su vida está dando un giro inesperado, y que no todo es como pensaba que sería. Que al crecer las relaciones se vuelven un poco más complicadas.
Esta quizá es una historia típica de romance veraniego adolescente, con bastante drama y poca profundidad, pero a veces eso es lo que necesitamos en esta época del año. Desconectarnos con una lectura sencilla y ligera.
El verano suele asociarse con romances fugaces y algo de drama, pero entre los libros seleccionados hay un poco más que eso, porque está bueno pensar en esos lectores a los cuales el romance por sí solo no les gusta. Tanto No te enamores de Rosa Santos como Una Sonata de Verano nos ofrecen una trama más profunda, con una historia de amor de fondo, pero a su vez un componente mágico que nos corre de la típica historia veraniega. En Amor & Gelato nos encontramos con una adolescente lidiando con el duelo y reconociendo a su madre en un país desconocido, y Éramos mentirosos lejos está de ser la típica novela que pensamos cuando elegimos algo para pasar las vacaciones, sin embargo tiene las mejores vibras veraniegas y un misterio inquietante y perturbador.
Por otro lado, las dos historias que restan, Amor de verano y El verano en el que me enamoré sí son bien románticas, ideales para leer en la playa, de una sentada, bajo el rayo del sol.
Espero que alguna de estas opciones les guste y les sirvan para pasar lo que nos resta de este caluroso verano.