Entre sus obras destacadas se encuentran la construcción de un futbolista, un gimnasta, un levantador de pesas y un metegol en primera persona, todos ellos constituidos por metal desechable.
El artista urbano Guillermo Galetti recreó con partes de una reposera vieja la atajada de Emiliano «Dibu» Martínez al delantero francés Kolo Muani en la final de la Copa del Mundo, y consideró que ese momento representa «al guerrero, el atleta, la historia y el héroe».
«Construí la obra del Dibu (Martínez) con partes de una reposera vieja, literalmente corrí hasta el taller a despedazarla el mismo día de esa tapada gloriosa, como juego y desde el afecto confeccioné el aparatito para sumarlo a otros artefactos de mi colección», destacó Galetti en diálogo con Télam, quien es conocido en Instagram como @ladrondechatarra, donde tiene más de 140 mil seguidores.
La obra recrea la histórica atajada del actual arquero del Aston Villa de Inglaterra en la final del Mundial de Fútbol, quien a los 122 minutos con 43 segundos tapó con su pierna izquierda el remate de Muani que permitió al seleccionado argentino mantener el empate y llegar a los penales, donde el propio Dibu Martínez volvió a tener un rol fundamental para que Argentina consiguiera la tercera Copa del Mundo.
«Esa atajada lo tiene todo, ya que representa al guerrero, el atleta, la historia y el héroe. Como pude improvisé la anatomía y secuencia básicas y más representativas de la escena», remarcó el artista oriundo de la localidad neuquina de Villa La Angostura.
Y agregó: «El resultado final me dejó disconforme, pero luego de jugar un rato me convencí de que la ingenuidad y las imperfecciones también podían rendir un humilde homenaje. Al subirlo a las redes las devoluciones fueron muy positivas, creativas, constructivas y graciosas».
Galletti, quien se considera autodidacta, aprendió de su padre el oficio de la herrería en su niñez.
«Viví en una zona rural durante un buen tiempo y jugar con los fierros era un pasatiempo», recordó.
Entre sus obras destacadas se encuentran la construcción de un futbolista, un gimnasta, un levantador de pesas y un metegol en primera persona, todos ellos constituidos por metal desechable.
Galletti, quien ejerce como docente de educación física en el Centro de Educación Física (C.E.F) Número 7 de Villa la Angostura, indicó que durante la pandemia comenzó a difundir su actividad artística por redes sociales, con el apoyo de su esposa, hija y hermana, teniendo un gran afluente de visitas de usuarios que miraban con asombro sus obras de hojalata.
Sobre el uso de materiales desechables, Galletti explicó que por causas económicas «la única manera que tenía de construir y ensayar mis modelos era con descartes generalmente de obras en construcción y volquetes de la calle».
Guillermo se considera «un improvisado, autodidacta y desconocedor del mundo del arte», aunque pondera sus conocimientos sobre la biomecánica, física y biología razón por la cual sus construcciones «responden a rigores científicos y son buenas herramientas de experimentación para el análisis del movimiento y otras son delirios».
«Mis obras abrieron debates sobre temas vinculados a biomecánica, otras sirven como herramientas didácticas y también construí juegos que hoy son conocidos en todo el mundo como mi obra del levantador de pesas o el corredor», dijo.
Su actividad en redes sociales comenzó el 4 de abril de 2020 y sus obras fueron reconocidas por varios artistas y hasta por el crítico de arte estadounidense Jerry Saltz, columnista de la revista «New York» que le permitió a Galetti tener mayor visibilidad a nivel mundial.
Una de sus obras más reconocidas del artista es el «levantador de pesas», que en Instagram, logró tener más de 1 millón de «me gusta».