El Gobierno municipal proyecta una nueva tasa que se cobrará al cargar combustible y pidió actualizar periódicamente los tributos en base a la inflación. El oficialismo, con mayoría en las áreas de trabajo del Concejo. Organizaciones sociales acamparon frente al Municipio para reclamar la entrega de canastas navideñas.

 

Presupuesto: nueva tasa y actualizaciones por inflación

El Gobierno local presentó el martes pasado el Presupuesto 2024, con varias novedades salientes.

La suba promedio de tasas será del 120%, incluida la TSU (Tasa de Servicios Urbanos) -uno de los principales ingresos de la comuna-. Pero también se creará un nuevo tributo: la Tasa de Mantenimiento de la Red Vial Urbana Municipal.

La misma se instrumentará con el objetivo de “mejorar el esquema de financiamiento y cobertura del costo de los servicios que hacen al mantenimiento y conservación de la red vial urbana en General Pueyrredon”.

Y se cobrará con una alícuota del 3%, sin impuestos, al cargar nafta o gasoil. Por lo que el consumidor deberá abonar, en total, aproximadamente un 1,86% extra cuando pase por la estación de servicio. La tasa, en principio, también la pagarán los turistas. Se trata de una iniciativa similar a la que se aprobó días atrás en Rosario.

Por otro lado, en la presentación del paquete de ordenanzas el Ejecutivo local pidió autorización para realizar actualizaciones periódicas en el valor de las tasas a partir de las variaciones registradas por el Índice de Precios al Consumidor (IPC). La intención, claro está, apunta a no licuar los ingresos municipales en un contexto de inflación alta.

Además, ante el ajuste anunciado para la realización de obra pública, el Municipio congeló el presupuesto destinado a intervenciones para el 2024: se destinarán $6.491 millones, mientras que el año pasado se proyectaron $6.350 millones. En tanto, de 60 obras se calcularon 30 para el próximo ejercicio.

El reparto de las comisiones

Tras obtener la mayoría propia en las últimas elecciones, con 13 de 24 bancas para el oficialismo, el interbloque de Juntos por el Cambio conducirá las principales comisiones internas del Legislativo. Y, además, contará con mayoría en cada una de las 13 áreas de trabajo. 

El reparto de las presidencias muestra mayor división, aunque el interbloque oficialista gobernará las más importantes, a excepción de Hacienda.

Daniel Núñez (UCR) mantendrá la presidencia de Legislación; Cecilia Martínez (Crear Más Libertad) conducirá Hacienda; Angélica González (Coalición Cívica) se quedará con Obras; Guillermo Volponi (Vamos Juntos) estará en Movilidad Urbana;  Diego García (Unión por la Patria)  en Salud; y Gustavo Pujato (UCR) en Educación.

En tanto, Miguel Guglielmotti (UxP) presidirá Industria; Ariel Ciano (Frente Renovador) Turismo; Florencia Ranellucci (Vamos Juntos) Ambiente; Valeria Crespo (UxP) Derechos Humanos y también la comisión de Políticas de Género; Ricardo Liceaga Viñas (UCR) Deportes; y Eva Ayala (Acción Marplatense) Seguridad.

Acampe y tensión

Durante la última semana, el Gobierno que conduce Guillermo Montenegro debió afrontar el primer foco de conflicto del segundo mandato, además del paro de municipales que se anunció para este viernes y sábado en el marco de una nueva negociación paritaria.

Organizaciones sociales acamparon durante tres noches frente al Palacio Municipal para reclamar la entrega de canastas navideñas a unas 50.000 familias en situación de vulnerabilidad. Encabezaron la protesta el Movimiento Teresa Rodríguez, el Polo Obrero, la agrupación Mariano Ferreyra y Convocatoria Segunda Independencia.

La gestión local se opuso a otorgarlas por inconvenientes en la licitación. El argumento fue que el proveedor subió el presupuesto que se estimaba y pedía un pago a 15 días y no a 60 para cubrirse por la inflación.

En conferencia de prensa, el intendente remarcó que la comuna no está dispuesta a pagar “$500 millones” por las canastas. Del lado de las organizaciones sociales destacaron que las mismas incluyen “un pan dulce, un pollo, un budín, un arroz, una mayonesa y una lata de arvejas”.

El miércoles, a 22 años del “Argentinazo” que derivó en la renuncia del ex presidente Fernando de la Rúa, diversas organizaciones marcharon en repudio de las medidas de ajuste que dispuso el Gobierno nacional que conduce Javier Milei. Y también se solidarizaron con el reclamo por las canastas navideñas.

La medida de acción directa se dio sin incidentes, luego de que Montenegro pidiera la aplicación del protocolo antipiquetes que confeccionó el Ministerio de Seguridad de la Nación con el objetivo de que no se corte el tránsito cuando ocurran este tipo de manifestaciones.

A pesar de ello, una columna de más de 100 metros marchó desde Luro y San Juan hasta la costa, más precisamente hasta el Puente de las Américas, donde se leyó un documento final.

La batalla legal por las canastas continuó el jueves, cuando hubo una mediación judicial entre el Municipio y las organizaciones. En principio, se resolvió trasladar el acampe sobre la vereda y la plaza San Martín, en busca de abrir una mesa de diálogo con el Ejecutivo para resolver el conflicto.

Tras una reunión con funcionarios, se confirmó que no se entregarán las cajas navideñas. Sin embargo, el Ejecutivo abrió la posibilidad de otorgar trabajo a las cooperativas que funcionan bajo la órbita de las organizaciones para realizar arreglos en escuelas municipales, por lo que finalmente se levantó el acampe.