Un proyecto inmobiliario, catalizado por las tensiones políticas de la época, devino en un tiroteo dentro del recinto. El inconcluso Bristol Center y los balazos en la pared mantienen vivo el recuerdo de una Sesión que quedó en la historia.
Por Thom Lahitte
Siendo las 21:35 horas, y cuando el señor Presidente resuelve reanudar la sesión, y los señores concejales ocupan sus bancas, se produce un grave desorden y se escuchan detonaciones de diferentes armas de fuego.
Acta de Sesiones – 4ta Sesión Pública Ordinaria – 5/12/1974
Cruces, chicanas y debates de alto voltaje forman parte de la vida cotidiana del recinto legislativo. En más de 100 años de historia, la cosa pasó a mayores un puñado de veces con forcejeos, desalojos de la sala y suspensiones.
Pero lo de la noche del 5 de diciembre de 1974 corresponde a otra categoría: alguien desenfundó y disparó dentro del recinto, otros contestaron. Varios de los balazos -nueve en total- todavía pueden verse en la madera del Concejo Deliberante. ¿El origen? Un tenso debate por un proyecto edilicio e inmobiliario.
El Bristol Center
Tres torres, galerías comerciales y puentes en dirección de la rambla en una manzana clave de la costa. El Bristol Center era un proyecto de enorme magnitud para la época que buscaba recoger el testigo del Bristol Hotel, icónico edificio de los años ‘30.
El expediente levantó polvareda desde el comienzo. Fue aprobado por excepción durante la gestión del comisionado Garro en la época de Onganía.
“Ya presentaba algunas controversias e irregularidades en los planos porque iba en contra de las disposiciones del Plan Regulador, careciendo de un estudio técnico de impacto, y denunciado de no haber abonado los derechos de construcción”, afirma Víctor Pegoraro en su paper “La urbanización del ocio»: interés privado y planificación estatal en Mar del Plata (1930-1979)”. Otra de las polémicas era el cono de sombra que proyectaría sobre las playas más populares de la costa.
En 1972 la obra se paralizó debido al cambio de dueño. Allí sería tomada por las firmas Fundar S.A. y Construir S.A. pertenecientes a David Graiver, un empresario que fue más conocido por ser el “banquero de Montoneros”.
Balística legislativa
Adalberto Castro, de la UCR, termina su discurso. Es apenas el segundo orador de la noche pero la barra, ya impaciente, interrumpe la Sesión. Luego será el turno de Luis Omoldi, edil del FREJULI, la facción peronista que se oponía al proyecto. En el Acta de Sesiones constan tres interrupciones ante las denuncias de corrupción y el señalamiento de arbitrariedades frente a otros proyectos en la zona.
Es el turno de Rodolfo Santamaría, representante del Partido Federal, quien apoya el proyecto y que corre una suerte similar.
Griterío desde la barra que produce prolongada interrupción obligando a la Presidencia insistentes llamados al orden.
Son las 21:15 y el presidente del PS, Ricardo Juncos, llama al cuarto intermedio. El parate durará 20’. Un cartel de Isabel Martínez de Perón sirve como catalizador del tenso debate. Se escucha una detonación, que según algunos registros, casi da en la cabeza del secretario Pelaez. De forma casi milagrosa, ninguno de los nueve disparos efectuados provoca heridos.
22:10 Breve debate, moción de orden y desalojo de la barra
22:15 Nuevo cuarto intermedio
23:40 La Sesión se reanuda y hay una expresión de repudio firmada por todos los bloques.
Extracto de la Sesión dónde se describen los disparos tras el cuarto intermedio.
El debate es retomado sólo con la presencia de concejales, asesores y periodistas. Los argumentos se extienden hasta pasadas la 1 de la mañana donde se ponen a disposición tres despachos: el del oficialismo, el de la UCR y el del FREJULI.
Mientras que los últimos dos son rechazados, el primero resulta en empate. Por la positiva votan los nueve socialistas, los dos del Partido Federal y el radical Cano. El sufragio negativo proviene de las nueve bancas del FREJULI y los tres UCR restantes. El desempate corresponde a la presidencia. A la 1:30, luego de más de cinco horas, golpes y balazos, Ricardo Junco, presidente del HCD, da luz verde al envío.
Impactos de bala en el recinto legislativo.
Esquirlas
Esa noche, que algunos ediles recuerdan como “la más nefasta” en la historia del Concejo, no surtiría efectos prácticos. El Rodrigazo, la muerte de Graiver en el 76´ y la llegada de la dictadura fueron un golpe mortal para el emprendimiento.
Ubicado sobre la costa entre San Martín y Rivadavia, nunca fue terminado. En los años 90´ completaron dos de las tres torres: el Bristol Condominio Apart Hotel y el Edificio Bristol. El proyecto también preveía la cesión al gobierno municipal de un auditorio con una superficie aproximada de 370m² y un salón de exposiciones de 390 m2 que tampoco fue efectivizado.
Al menos dos de los balazos pueden encontrarse a simple vista detrás y a la derecha de la ubicación de la presidencia del cuerpo, justo encima de dónde se maneja el sonido de cada sesión.