Por Mariana Isa
En un partido histórico y apasionante, el Tiburón venció a San Martín de San Juan por 4 a 2 en el José María Minella y aseguró la permanencia en la máxima categoría del fútbol argentino.
El juego comenzó tímido, pero con el correr de los minutos fue la visita la que encontró espacios y se animó a profundizar, para llegar con riesgo a área local. La pelota parada fue la vía, pero Jorge Carranza la respuesta para dejar en cero el marcador. Y Aldosivi se fue al descanso con más dudas y presiones, que con certezas.
Aldosivi salió a jugar el complemento con una preocupación inesperada: De la Vega no pudo seguir por una molestia en la rodilla y entró Franco Rami. Casi sin tiempo para acomodarse, Guzmán volvió a hacer lo que hizo toda la tarde: encarar, ganar por afuera y tirar el centro. Esta vez encontró bien parado a Giani, que metió un buen cabezazo, pero otra vez el arquero rival respondió firme.
El Tiburón tenía mejor energía, más empuje, pero le costaba ese último pase que te abre un partido. Y mientras buscaba adueñarse del trámite, San Martín avisó dos veces. Las dos terminaron anuladas por offside, pero la tercera —tras intervención del VAR— sí contó: Barrera, recién ingresado, aprovechó una floja reacción de Carranza y puso el 1-0 a los 21 minutos. Un baldazo de agua fría.
Una reacción rápida
Aldosivi necesitaba reaccionar rápido. Farré movió el banco para darle oxígeno al ataque. La respuesta no tardó: el equipo volvió a plantarse en campo rival y obligó a Borgogno a trabajar. Preciado tuvo una clarísima, pero el arquero le ahogó el grito.
Hasta que llegó el desahogo. Moya apareció en el área y aprovechó una pelota que bajó Cabral. Le quedó incómoda, pero la acomodó con una definición precisa para el 1-1. Ese gol ya valía la permanencia, pero Aldosivi quería más.
Y lo consiguió enseguida. Palavecino peinó un saque largo de Carranza, Rami atacó el espacio y metió el gol que hizo delirar al Minella: 2-1.
Pero la tarde tenía más capítulos. A los 40, Moya llegó tarde a un cierre y cometió penal sobre Orihuela. Tras revisarlo en el VAR, Fernández lo cambió por gol y puso el 2-2, encendiendo la ilusión sanjuanina.
Ilusión que duró… un minuto. En la jugada siguiente, Palavecino desbordó por derecha, sacó el centro y una mala resolución de Lecanda dejó la pelota servida para Giani, que empujó el 3-2 a dos minutos del final.
Pero todavía había más. En tiempo adicionado, Orihuela bajó a Preciado dentro del área. El ecuatoriano tomó la pelota y lo cambió por gol para el 4-2 definitivo.
Con carácter, con goles y sufriendo hasta el último minuto, Aldosivi selló la permanencia en la Primera División. Otro cierre de temporada cargado de épica, de esos que el hincha no se olvidará jamás.