Es claro que el país no es una potencia futbolística, pero sí una nación petrolera, conducida por una monarquía absolutista, atravesada por dunas y con una férrea fe en el Islam.
1 Reino de Arabia Saudita. Debe el nombre a tener a una monarquía como cabeza de Estado. Arabia por la península arábiga, y Saudita, por la casa de Saud, que es la familia real de la que vienen los gobernantes. Vale decir: es un país que lleva el nombre de una familia. Absolutista, porque no reconoce la división de poderes. Salmán bin Abdulaziz, de 86 años, es quien detenta los destinos del país.
2 El petróleo, en el centro de la vida económica. No sólo es en primer exportador del mundo del recurso descubierto en 1938, y el segundo en cantidad de reservas (detrás de Venezuela) sino que además cuenta con un extra: está casi en la superficie, lo que hace mucho más económica la explotación, y eso redunda en beneficios más altos.
3 En la península más grande del mundo. Se trata de unos 3 millones de km cuadrados, de los cuales poco más de 2 corresponden a Arabia Saudita. A la vez, tiene el desierto con mayor cantidad de dunas ininterrumpidas del planeta (el de Rub al-jali). Esta dura geografía ingresa en el podio en cuanto a extensión, detrás del de Sahara y de Australia. Y podría explicar los 45 grados de temperatura promedio que padecen los árabes en verano.
4 La Meca como centro del credo musulmán. Es donde nació Mahoma en el 570 después de Cristo, y por tanto se considera la cuna del islamismo. Por ello, todo musulmán, al orar, debe apuntar hacia donde se encuentra la mezquita de esta ciudad.
8 La bandera más alta del mundo es saudí. Y se encuentra en la ciudad de Yeda. El mástil tiene nada menos que 170 metros de altura, algo así como un edificio de 60 pisos. La bandera del país es de las pocas que llevan letras, las que dicen: “No hay más Dios que Alá, y Mahoma es su profeta”. Acompaña un sable, que es el símbolo de la militancia en la fe musulmana. El verde es el color del Islam.
9 Y un día las mujeres pudieron votar. Arabia Saudita es considerado uno de los países más radicales en la interpretación del Islam, pero puede hablarse de cierta flexibilización reciente. De hecho, actualmente las mujeres pueden conducir, y viajar sin compañía masculina. Incluso, pueden ingresar al ejército, aunque las altas graduaciones estén aún reservadas a los hombres. Y en las elecciones del 2015, las mujeres votaron por primera vez. Se inscribieron 130.600 para elegir e incluso ser parte del Consejo de la Shura, un órgano asesor de la monarquía.
10 Una capital que no se inunda pero ve llover. Que Riad, sea la capital y la ciudad más poblada del país, no es una casualidad. Significa “lugar de jardines y árboles” y es de los casi únicos sitios que almacenan agua de las lluvias que caen en el desierto. Actualmente cuenta con poco más de 7 millones de habitantes, algo así como la mitad de la zona metropolitana de Buenos Aires.