Camuflado detrás del calor del verano, un fantasma acecha a los marplatenses: el de la boleta del gas. La combinación de devaluación, más quita de subsidios, más eliminación del beneficio de Zona Fría implicaría un golpe rotundo a los bolsillos de los usuarios de la red de gas natural de General Pueyrredon. Referentes locales ya alzaron la voz de alerta, incluido el intendente Guillermo Montenegro.

Por Limay Ameztoy

El golpe de efecto logrado por el gobierno nacional con su combo dolarización+DNU+Ley Ómnibus va mermando lentamente y diferentes sectores -tanto dirigenciales como la propia sociedad civil- comienzan a dimensionar las implicancias del paquete de medidas que se pretende implementar.

Entre dichas consecuencias figura un mega tarifazo para los usuarios de la red de gas natural, entre los cuales -por razones de categorización y de consumo- hay quienes salen más o menos afectados: los marplatenses y batanenses figuran entre los primeros.

Pasado el primer momento de desconcierto, algunas voces se fueron animando a poner el tema sobre la mesa. La amenaza latente amerita el planteo, aunque suene antipático o prematuro en plena temporada.

La primera en reaccionar fue la presidenta de la Liga de Consumidores, Usuarios y Amas de Casa de Mar del Plata, Marisa Sánchez, única expositora por General Pueyrredon en la Audiencia Pública llevada adelante el 8 de enero con participantes de todo el país. Durante el encuentro, la referente local se opuso tanto a los aumentos como a la quita del beneficio de Zonas Frías: “es una canallada y un atropello”, dijo.

Por su parte, Eduardo Carnicero, delegado en Mar del Plata de la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, afirmó a esta cronista que el organismo provincial también se opuso a los aumentos, ya no en representación de Mar del Plata pero sí de toda la provincia. La Defensoría calificó los aumentos solicitados por las empresas distribuidoras de “desproporcionados, irrazonables y contrarios a la equidad y la justicia distributiva». 

El último en alzar la voz, al menos durante los últimos días, fue el intendente Guillermo Montenegro, quien afirmó que las medidas anunciadas “perjudican exponencialmente” a los vecinos de Mar del Plata y reclamó al gobierno nacional que “dialogue con el interior”.

Tratando de entender lo que se viene

La complejidad de la fórmula que se aplica para obtener el valor final a cobrar a cada usuario de la red de gas natural dificulta el análisis. Sin embargo, cuando se empiezan a desglosar los factores y se pondera el impacto alcista que los anuncios realizados tendrían en cada uno de ellos, la preocupación comienza a tener fundamento.

A continuación algunos de los factores a tener en cuenta:

1- La histórica devaluación del peso incide directamente sobre el valor de un producto cuyos costos de producción -desde la extracción hasta la llegada a las bocas de consumo- están ligados al dólar.

2- La quita de los subsidios anunciada por el gobierno nacional implica que esos costos, que hasta el momento son absorbidos por el Estado, deberán ser financiados directamente por los y las consumidores.

3- La Ley Ómnibus también incluye un apartado que desarma el fideicomiso con el que se financian los descuentos a las personas usuarias de las denominadas Zonas Frías. 

Cuánto aumentará: de 1500 % para arriba

Por el momento, los datos que se manejan son insuficientes para hablar de números concretos. 

Un informe conocido el pasado 20 de enero elaborado por el Observatorio de Tarifas y Subsidios UBA-Conicet estima que el incremento sería del 1500 %. Como ejemplo mencionaron que la factura de una familia de ingresos altos (N1) pasaría de $1335 en enero a $20.210 en junio; la de una familia de ingresos medios (N3) saltaría de $977 a $20 207 y la de una familia de ingresos bajos (N2, la única que retendría subsidios) de $886 a $13 998 de enero a junio. 

Sin embargo, el informe solo plantea un piso dado que se trata de un promedio (cada empresa solicitó un incremento diferente) que además no contempla a las zonas beneficiadas por la categoría de Zona Fría e incluye un subsidio del 80 % a la producción.

En el caso de Mar del Plata, la empresa Camuzzi Gas Pampeana, solicitó un aumento del 421 %. 

Ahora bien: para comenzar a aplicarse esta cifra aún debe ser aceptada por la Secretaría de Energía de la Nación, que días después de la audiencia adelantó que no aceptará los pedidos planteados por las empresas de manera total. Resta saber cuánto sí les concederá, dado que sí es innegable que, a raíz de la devaluación, las empresas sufrieron un impacto en sus balances.

El secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, sí informó durante la audiencia pública que habrá una “readecuación progresiva de subsidios” durante los próximos tres meses. En detalle, habría una quita del 33 % de la asistencia en los inicios de febrero, marzo y abril hasta que los usuarios pasarían a pagar el costo total del gas. 

El funcionario afirmó que pasarán de pagar 0,7 USD a USD 4,1 el millón de BTU.

Reclamos marplatenses

Como ya se mencionó, la primera en alertar sobre las consecuencias de este paquete para Mar del Plata y Batán fue la referente de la Liga de Consumidores, Usuarios y Amas de Casa de Mar del Plata, Marisa Sánchez.

En diálogo con esta columna afirmó que durante la audiencia realizada el 8 de enero solicitó que no se apliquen aumentos mensuales (uno de los pedidos de las empresas distribuidoras) y que tampoco se quiten los beneficios por zonas frías.

“Sería un acto de autoritarismo, un atropello y una canallada” afirmó la referente, quien recordó que este aumento se sumaría a los que ya vienen sufriendo otros costos fijos de las familias, como el de la canasta alimentaria, los medicamentos o la luz. “Así no hay bolsillo que aguante” dijo. También relató que “el pedido de frenar los aumentos fue unánime” y entendió que las audiencias “deberían ser presenciales y vinculantes”.

Por su parte, el delegado de la Defensoría del Pueblo afirmó que la devaluación del 118 %, sumada al DNU y el proyecto de Ley Ómnibus, constituyen “un combo explosivo” y que se están analizando las medidas a adoptar.

En este sentido recordó que ya se interpuso ante la justicia federal una acción de inconstitucionalidad y nulidad contra el DNU. Y en cuanto a las modificaciones tarifarias, relató que por razones administrativas judiciales antes de iniciar cualquier acción es necesario contar con un acto en concreto porqué de lo contrario “sería una precautelar y la justicia es reacia a otorgarlos”.

“Hay que esperar a que esté vigente el nuevo cuadro tarifario” dijo y anticipó que “una vez que entre en vigencia la Defensoría analizará, como lo ha hecho muchas veces, cuál es la mejor manera de evitar cualquier sanción en perjuicio de los usuarios y consumidores”.

Por su parte el 22 de enero el intendente Montenegro utilizó la red X (ex twitter) para solicitar que se mantenga el régimen de zonas frías.

Montenegro y un perjuicio enorme para los marplatenses

El intendente comenzó recordando que “hace dos años se aprobó una ley que contempla que los argentinos que viven con condiciones climáticas adversas puedan acceder a una tarifa de gas acorde a la situación de cada lugar” y que Mar del Plata está incluida en ese régimen.

“Es importante que entendamos que no es un capricho ni una cuestión de beneficios por que sí -se explayó-: es una manera de hacer que las zonas geográficas en las que es 100 % necesario usar más calefacción debido a las bajas temperaturas puedan hacerlo. El gas es vital para los hogares y nadie puede negar que no es lo mismo calefaccionarse en Mar del Plata que en Capital Federal o el conurbano”.

Tras reconocer que “hoy nos enteramos que desde el Ejecutivo Nacional quieren derogar esta ley” Montenegro afirmó que “no se pueden tomar decisiones solo desde la lógica del AMBA” y consideró que “siempre se puede conversar y encontrar mejoras a los proyectos que acompañen las necesidades del Gobierno de la Nación, pero que de ninguna manera perjudiquen exponencialmente a nuestros vecinos”.

“Voy a trabajar para explicarle a cada autoridad y a cada legislador el enorme riesgo que tendría aprobar este proyecto” concluyó el jefe comunal.

El radicalismo bonaerense reclama

En las últimas horas también el radicalismo bonaerense salió a posicionarse en contra de la eliminación del régimen de Zonas Frías. Esta posición estuvo representada en Mar del Plata por el diputado Diego Garciarena, quien se reunió con el intendente Montenegro y anunció, también vía X, que trabajarán “en conjunto para que no se interrumpa el Fondo Fiduciario Energético y mantener la vigencia de la zona fría para el servicio de gas”. 

En otra entrada en la ex twitter el legislador bonaerense por la Quinta Sección Electoral dio a entender que el senador nacional -también originario de Mar del Plata- Maximiliano Abad se opondrá a esa parte de la Ley Ómnibus al afirmar que su presencia en la Cámara alta de la Nación “asegura para marplatenses y batanenses una voz firme y una garantía para la defensa de los usuarios de nuestra ciudad y de todos los distritos de la Provincia”.