Picante. La tercera sesión ordinaria del año del Concejo Deliberante fue picante. El proyecto de privatización del estacionamiento medido se quedó con el protagonismo de la jornada ante la presente y expresa oposición de trabajadoras y trabajadores municipales. Con demoras, sin Banca 25 y con una barra “copada” por el gremio de empleadas y empleados públicos: así fueron los últimos pasos para aprobar la realización de la licitación del aparcamiento local.
Como es habitual, la sesión estuvo convocada para las 10 de la mañana del jueves. Ya 24 horas antes, desde el Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) adelantaron que se manifestarían tanto en las afueras como dentro del recinto, a la vez que convocaron a una conferencia de prensa.
Fue en esa instancia que Verónica Maio, secretaria de Higiene y Seguridad del STM y referente del área de Tránsito, comunicó que el sector trabajador vivía la jornada con “mucha tristeza” ante el inminente y cantado desenlace: el proyecto de privatización del estacionamiento medido se aprobó con la mayoría propia de la que goza el oficialismo, más los votos de los dos concejales que tiene el bloque Crear Más Libertad.
Una sesión retrasada
Se requirió una hora y media de espera para que la sesión finalmente comenzara. La primera intervención, luego de las lecturas de rigor, fue una cuestión de privilegio de la concejal de Acción Marplatense Eva Ayala. En su alocución, la edil expresó su preocupación ante las “arbitrariedades administrativas” que “limitan las voces de los marplatenses”. Se refería, entre otros casos, a la ausencia de Banca 25, un instrumento democrático que permite acercar de manera directa problemáticas y reclamos de vecinas y vecinos ante concejales.
Allí se incrementó el caos. El cántico que ya se escuchaba de “Banca 25, queremos la palabra” por quienes estaban en la barra del Concejo Deliberante aumentó su volumen y no cesó por veinte minutos. Fue necesario un cuarto intermedio que duró media hora para retomar la orden del día.
A decir verdad, no se retomó inmediatamente, sino que, tras un acuerdo entre bloques, la concejal radical Marianela Romero pidió poner al cuerpo en comisión. Esto, en criollo, permitió que Verónica Maio tomara la palabra por cinco minutos.
“Nosotros venimos siguiendo el expediente paso a paso, cambio por cambio, modificación por modificación, prestándole particular atención a todo lo que tiene que ver con el canon, con las zonas y con el rol que tendría el trabajador municipal”, dijo la representante al argumentar la oposición del gremio a la iniciativa de privatización.
Sumó como agravantes los cambios en las condiciones que deben cumplir las empresas para presentarse a la licitación. En el texto original se pedía que cumplieran con requisito a nivel nacional, “después se modifica para sólo lo local. Nos llama poderosamente la atención”, compartió Maio.
Otro punto de preocupación tiene que ver con el canon. Es que errores de tipeo y cambios de frecuencias culminaron en que, finalmente, “la empresa contratista sólo va a pagar 450.000 horas de estacionamiento cada cuatro meses, recaude lo que recaude y sean cuáles sean las zonas”.
Desde Tránsito han aclarado que se relevan 450.000 horas por mes, por lo que el monto finalmente plasmado les resulta irrisorio a las y los trabajadores del STM. “O sea que la municipalidad además de recibir un canon muy inferior a lo que hoy está recaudando va a tener empleados municipales que van a trabajar para una empresa privada de la ciudad”, lamentó.
“¿Cuál es el beneficio que tiene la municipalidad para la privatización del estacionamiento medido? ¿Qué es lo que le da a la ciudad?”, preguntó en resumen Maio.
Otras posturas
Fue el concejal oficialista Agustín Neme quien pidió la palabra luego. El edil expuso que esos beneficios se plasman en dotar de “mayor tecnología a nuestro Municipio”. Esto último generó diversas intervenciones de la oposición que tuvieron, entre otros, un común denominador: ¿por qué no puede el Municipio modernizar por sí mismo el sistema de estacionamiento medido, tal como se hizo cuando fue el traspaso de las tarjetas de papel a la generación del sistema digital hoy vigente?
“Nosotros no entendemos por qué es necesario licitar la concesión cuando esto lo puede llevar adelante perfectamente el Municipio como lo viene haciendo”, expuso la concejal de Unión por la Patria Valeria Crespo en su turno. Cuestionó ante el cuerpo, también, por qué resultaba necesario licitar el servicio para no obtener el 100% de lo recaudado y que las ganancias se las lleve “el empresario”.
Su par de Acción Marplatense, Horacio Taccone, se expresó en la misma línea y aseguró que “el estacionamiento medido podría funcionar mejor” sin la intervención de terceros. “No se entiende este ataque permanente a lo público”, cuestionó minutos más tarde Ariel Ciano, titular del bloque del Frente Renovador.
Mientras la presidente del Concejo Deliberante, Marina Sánchez Herrero, sometía a votación el proyecto, trabajadoras y trabajadores municipales vitoreaban “que vuelva a comisión”. Fue cuando el oficialismo junto con los concejales del bloque Crear Más Libertad votaron de manera positiva, transformando el proyecto en ordenanza. Las y los ediles de Unión por la Patria, Acción Marplatense y Frente Renovador fueron por la negativa.
Así, el Ejecutivo podrá licitar “la implementación, puesta en marcha, gestión, administración y mantenimiento del sistema de estacionamiento medido en la ciudad de Mar del Plata” por un plazo inicial de nueve años.
El resto fue cuestión de minutos y la orden del día, de corta extensión, se terminó de tratar en no más de veinte minutos.
Bonus
- Se aprobó el proyecto para prohibir la circulación de motos con caños de escape alterados.
- Se logró un despacho en común y se aprobó la creación de “Mar del Plata, Tierra de Campeones”. Será el EMDER quien determinará qué deportistas locales protagonizarán las 12 gigantografías a instalarse en los accesos a nuestra ciudad.