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marzo 28, 2024
Deportes

Reventa Mundial

Mañana se juega la final y muchos hinchas están en Qatar sin entrada. La disputa por las entradas, la relación FIFA – AFA y el hincha, dispuesto a casi todo por el partido.

Por Juma Lamacchia – Corresponsal

Doha, Qatar – Al término del partido Argentina vs Croacia por la semifinal del mundial lo primero que leí en un grupo de whatsapp de argentinos en Doha fue “busco entrada para la final, pago lo que sea”. Lo que sea, claro, es una forma de decir. Pero el negocio de la reventa de entradas y la obtención de un ticket para la final es algo que acompañó siempre a los mundiales y este caso no es la excepción.

El valor a precio oficial a través de la plataforma de la FIFA para la compra de entradas para la final es de 600 dólares para la categoría 3, 1.000 para la categoría 2 y 1.600 la 1. Tener esta entrada es un trabajo difícil, muchos aficionados optan por comprarla más allá de los equipos que lleguen. Por un lado, es el partido más importante desde lo futbolístico y te asegura presenciar algo histórico o, por lo menos, la presencia de estrellas. Y por otro lado, su valor comercial. 

Movimientos

Al clasificar la Selección Argentina automáticamente el mercado se movió. Con cuatro días de diferencia el público tenía el tiempo suficiente para negociar sus entradas. Los primeros vendedores pusieron el precio alrededor de los 4000 o 5000 dólares, sabiendo que incluso se podía vender a más, era la “primera oferta”. En mundiales pasados, precisamente en Brasil 2014, misma instancia, se llegaron a vender en 8000 dólares el día del partido. Pero los compradores no la hicieron fácil. En los grupos de whatsapp se acordó no darle lugar a quienes la vendan a ese precio, y no pagar más de 2000 (un precio razonable hablando de una reventa). De esa manera, aún se consiguen algunas entradas entre 2000 y 2500 dólares. Claro, teniendo un vendedor dispuesto a aceptar ese trato.

Entre las mejores ofertas se encuentra un guante de Emiliano “Dibu” Martínez a cambio de una entrada, y otro caso de una chica que con cierta ironía sugiere que encontrar un “Sugar Daddy” es su mejor opción para obtener un ticket. 

En Doha, los argentinos decidieron concentrarse en la puerta del hotel donde se encuentran algunos dirigentes de la AFA, en reclamo de entradas a precio oficial. Según circuló, la FIFA habría dispuesto de 10.000 entradas en estás últimas horas para los argentinos. Por un lado, se esperaba que sea la misma AFA quienes las vendiera, y por otro, que sea FIFA las que las ponga en venta en su plataforma web. Hasta el momento, ninguna de las dos sucedió. Se espera alguna respuesta de los dirigentes argentinos o algún gesto que permita que los miles de hinchas que están sin entrada puedan adquirirla, como sucedió en Brasil, que algún jugador negoció con Grondona la disponibilidad de entradas para la final. 

Especulaciones

La especulación de los compradores a esperar al día del partido para la compra de entradas hace de esto una historia larga. Que el último día las regalan, que FIFA las largará la noche anterior, que la misma AFA o la Embajada Argentina la misma mañana del partido, que ningún revendedor se quedará con una entrada de más a una hora del partido. Ahora, la disputa entre el precio de venta y la disponibilidad de compra de las entradas es una pelea que no tiene fin. El mercado de la reventa es ilegal, obligar a alguien que baje el precio a coste de la “pasión” es ir a reclamarle a la nada misma.

Exigir de una u otra manera la obligación de la venta de un ticket a precios “razonables” o quejarse de quienes tienen es otra torpeza. Salvo que sea a las autoridades, claro. El mundial es un evento masivo, quizás el más importante de todos a nivel deportivo, donde gran parte de la población quiere asistir. Ya sea por hobby, amor, negocio o turismo. La posibilidad de comprar entradas es igual para todos y comienza casi 10 meses antes y el precio de base se sabe desde un principio, lamentablemente y más en este mundial, no fue accesible para la gran mayoría. Lejos de hacer una apología al mercado de reventas ilegales de entradas, las reglas del juego son claras.

Hoy los hinchas argentinos (los que ya estaban en Doha y los que llegaron estos días) se concentraron en el Centro de Convenciones de FIFA – lugar donde se realizan trámites de entradas o tarjeta haya – para intentar hacer un poco más de ruido a la espera de una respuesta de dirigentes o para poner un lugar común en el que se puedan encontrar vendedores y compradores. Si bien la policía inspecciona la situación para evitarla, todos están en busca de lo mismo.

A menos de 24 horas de la final del mundo – léase también como el fin del mundo – hay miles de hinchas argentinos sin entrada para el partido. Se espera la llegada de más o menos 8.000 fanáticos que salieron desde Buenos Aires (algunos sin entradas) y la posibilidad de que sea cierto que esas entradas que FIFA le otorgó a la AFA sean vendidas al público en general y no asignadas a dedo, en devolución de favores, compradas por conveniencia a quienes disponen de más dinero o entregadas a las agencias de viaje para vender combos millonarios de tres días para ver el partido más importante de todos. Mientras tanto, la reventa sigue moviéndose durante la noche.

Se espera a que mañana a contrarreloj y sobre la hora el precio caiga, pero al haber tanta cantidad de hinchas, se cree que 40.000 ya tienen entrada y otros 10.000 estarían buscando, parece que podríamos encontrarnos con un récord monetario para ver al mejor jugador del mundo jugar su partido tan esperado.

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