La cantidad de plástico vertida en los mares es muy inferior a la estimada hasta ahora por los científicos, pero los desechos son más duraderos, según difundió hoy un estudio publicado por un equipo de investigadores.
Científicos de Países Bajos y Alemania llegaron a estas conclusiones a partir de proyecciones basadas en datos procedentes de observaciones de las costas así como la superficie y las profundidades de los océanos.
De acuerdo con ese informe, publicado en la revista Nature Geoscience, hay menos plástico en los mares de lo que se calculaba hasta ahora, pero hay más desechos flotando, consignó la agencia AFP.
Los autores calcularon que entre 470.000 y 540.000 toneladas de plástico acaban en los océanos cada año, una cifra que puede parecer descomunal, pero que resulta muy inferior a las 4 a 12 millones de toneladas estimadas hasta ahora.
En cambio, la cantidad de desechos plásticos que flotan en el mar -cerca de 3,2 millones de toneladas- es mucho mayor de lo calculado.
«La mayor parte de la masa de plásticos está compuesta por grandes objetos» (de más de 2,5 centímetros), que flotan con más facilidad, explican los autores del estudio.
Facilidad de juntarlos
La buena noticia es que los objetos grandes en la superficie son más fáciles de recoger que los microplásticos.
La mala, es que los plásticos permanecen mucho más tiempo en el océano de lo que se pensaba.
«Esto significa que los efectos de las medidas adoptadas para combatir los desechos plásticos tardarán más en verse», subrayó Mikael Kaadorp, de la Universidad de Utrecht, autor principal de este informe.
Y advirtió que «será aún más difícil volver a la situación anterior y si no actuamos ahora, los efectos se notarán durante mucho más tiempo».
El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma) adoptó en febrero de 2022 en Nairobi el principio de un tratado jurídicamente vinculante para combatir la contaminación plástica planetaria, en particular en el medio marino.
Durante una segunda sesión de debates en París en mayo pasado, 175 países examinaron opciones que servirán de base para su próxima cita de negociación, en noviembre en Kenia.