Con una convocatoria que superó todas las expectativas, la comunidad universitaria y los vecinos de Mar del Plata se unieron en una marcha masiva para expresar su rechazo al ajuste presupuestario que está afectando a la educación pública superior en todo el país. Más de 13 cuadras fueron llenadas por miles de personas, en una demostración de apoyo y compromiso con la defensa de la universidad pública, gratuita, laica y de calidad.

La movilización, que comenzó a las 16 horas en el Complejo ubicado en Funes y Peña, atrajo a numerosos grupos de personas que se dirigían hacia el punto de encuentro desde tempranas horas de la tarde. Entre los manifestantes se encontraban representantes de la Agremiación Docente Universitaria Marplatense (ADUM), la Asociación del Personal de la UNMDP (APU), la Federación Universitaria Marplatense (FUM) y los principales centros de estudiantes, quienes encabezaron el camino.

A medida que avanzaba la marcha, se sumaban miles de estudiantes, docentes y ciudadanos que, con libros, carteles y banderas, llenaron las calles para respaldar el reclamo. Incluso, la presencia de los alumnos de la Escuela Primaria Nº31, quienes asomaron por las ventanas para aplaudir junto a sus docentes, resaltó la solidaridad y el apoyo intergeneracional en esta causa.

El recorrido, que alcanzó su punto culminante en el Monumento a San Martín pasadas las 19 horas, fue acompañado por el reconocimiento al valor de la educación universitaria en Argentina y la necesidad imperante de garantizar su acceso para las generaciones presentes y futuras. La vicerrectora de la UNMDP, Silvia Berardo, destacó la magnitud de la convocatoria, resaltando la diversidad y el compromiso de la comunidad universitaria.

Un reclamo conjunto

Durante el acto final, los representantes de las diferentes entidades organizadoras enfatizaron la importancia de la coordinación y articulación entre las federaciones y el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) para llevar adelante esta histórica movilización. Asimismo, se hicieron eco de los problemas que enfrenta el CONICET, haciendo hincapié en la necesidad de un mayor presupuesto para la investigación científica y el desarrollo tecnológico en el país.

En este contexto, se anunciaron futuras jornadas de paros y movilizaciones en caso de no obtener respuestas por parte del gobierno. Pedro Sanllorenti de ADUM convocó a mantenerse en las calles para seguir defendiendo los derechos de la educación superior y del conjunto del pueblo argentino.

En resumen, la marcha en Mar del Plata fue un claro mensaje de unidad y resistencia en defensa de la educación pública, marcando un hito en la lucha por una universidad inclusiva, federal y de calidad para todos los argentinos.