El oriundo de Mar del Plata tendrá un gran desafío para su carrera deportiva. Se enfrentará al estadounidense Danny Silva el sábado 2 de agosto, desde las 22, con con televisación de Fox Sports.
Por Lucas Alarcón
Con apenas 22 años, el marplatense Kevin Vallejos se prepara para uno de los desafíos más importantes de su carrera en Las Vegas este sábado 2 de agosto, a partir de las 22 con televisación de Fox Sports. La expectativa por su pelea en UFC no solo marca un nuevo capítulo en su ascenso profesional, sino que refleja un fenómeno mayor: el desembarco argentino en las artes marciales mixtas, con el objetivo común de traer la competencia al país.
En Mar del Plata se lo conoce desde chico como el Chino. En los gimnasios, lo vieron formarse con una mezcla de talento, disciplina y hambre de gloria. Hoy, Kevin Vallejos ya no es solo una promesa local: forma parte de la flamante legión argentina que pisa fuerte en la UFC, la liga más importante de artes marciales mixtas (MMA) del mundo.
Su próxima pelea de este sábado en el UFC Apex de Las Vegas ante el estadounidense Danny Silva genera revuelo. No solo por lo que está en juego dentro del octágono, sino por lo que representa fuera de él. En una entrevista con SPORT, Vallejos conversó sobre sus objetivos, su estado físico y la inspiración que encuentra en figuras como Ilia Topuria y Charles Oliveira. “Quiero ser perfecto como Topuria y querido como Oliveira”, expresó, trazando un paralelo con dos de los grandes ídolos actuales de la disciplina.
De Mar del Plata a Las Vegas, con hambre de historia
Vallejos se crio en Mar del Plata y desde sus primeros pasos mostró una determinación que hoy lo convierte en referente de una nueva generación. Con una sólida formación en jiu-jitsu y un estilo explosivo, sus combates despiertan cada vez más atención. Pero él tiene claro que su misión va más allá de ganar peleas.
En la previa del combate, se cruzó mensajes provocadores con su rival Danny Silva, en una típica escalada de tensión que caracteriza al mundo UFC. “Estamos haciendo historia para Argentina”, respondió el marplatense a las provocaciones, en referencia al crecimiento de la presencia nacional en la liga. En esa línea, también pelea este fin de semana el neuquino Esteban Ribovics, otro nombre clave en esta camada de peleadores argentinos que buscan abrir camino en la elite global.
La coincidencia no es menor: por primera vez, dos argentinos compiten el mismo fin de semana en Las Vegas, en eventos centrales de UFC. Lo que hasta hace poco era una excepción hoy se consolida como tendencia.
Un objetivo compartido: traer la UFC a la Argentina
Si bien el foco está puesto en la performance individual de cada uno, tanto Vallejos como Ribovics —y antes Santiago Ponzinibbio y Laureano Staropoli— tienen un objetivo en común: traer la UFC a la Argentina.
No parece un sueño lejano. Según cifras recientes, la UFC genera más de 450 millones de dólares al año solo en pago por visión. Tras el fenómeno del español-georgiano Ilia Topuria y la expansión del espectáculo a Europa y África, los organizadores ya piensan en nuevas plazas. Y Argentina, con una afición fervorosa, no está fuera del radar.


En ese contexto, el rol de Vallejos es doble: como atleta en ascenso, pero también como embajador de un movimiento que quiere instalar las MMA como un deporte de masas en el país. “El objetivo es traer la UFC a casa”, repite cada vez que puede.
El Chino Vallejos pelea por su carrera, sí. Pero también por algo más grande: poner a Mar del Plata —y a la Argentina— en el centro de la jaula más codiciada del mundo. Mientras su nombre empieza a sonar cada vez más fuerte, una ciudad entera sigue sus pasos con orgullo. Y sueña con verlo, algún día, entrar al octágono frente a su gente.