La Liga Marplatense cuenta con unos 12.000 futbolistas federados entre todas sus categorías. No se juegan partidos oficiales bajo su órbita desde 2019. En las últimas horas surgió una luz al final del túnel que permite creer en una vuelta de la actividad.
Por Victor Molinero
El fútbol infanto juvenil en Mar del Plata está inactivo desde diciembre de 2019. Más allá de los entrenamientos virtuales que se hicieron durante buena parte de 2020 y algunos movimientos físicos en campo hacia fines del año pasado, los chicos y chicas de la ciudad no juegan partidos organizados por la Liga Marplatense de Fútbol hace más de un año.
Para tomar real dimensión de la cantidad de familias que se ven afectadas por este prolongado receso forzado por la pandemia, basta con decir que en Mar del Plata son casi 12.000 las personas federadas en las distintas ramas (primera división y juveniles para damas y caballeros, más el futsal).
Por fin de semana se juegan en la ciudad unos 240 partidos de juveniles (entre Liga y Preliga), otros 15 de primera división y 40 del fútbol femenino. Sumando los del futsal se llega a la cifra de 300 partidos de futbolistas federados en el ámbito marplatense por fin de semana. Sin pandemia claro.
Si bien el Consejo Federal que nuclea a todas las ligas del interior del país habilitó el 26 de enero la vuelta de la actividad oficial para las categorías formativas, desde la LMF siempre primó la idea de que el fútbol volvería cuando se pueda habilitar la presencia de público.
12.000 Son los futbolistas federados en la LMF entre todas sus categorías.
300 Son los partidos que se desarrollaban por fin de semana antes de la pandemia en el ámbito de la LMF.
150 Son las personas que podrían ingresar por partido entre protagonistas, auxiliares, dirigentes y socios según un protocolo enviado por la Aprevide.
Cabe recordar que en Mar del Plata, los 32 clubes afiliados a la LMF van a pérdida con el torneo de primera división y los ingresos del fútbol se dan a través de las inferiores, ya sea por concepto de entradas o servicio de buffet en las maratónicas jornadas de cada fin de semana.
Sin dudas las agotadas arcas de los clubes marplatenses han sentido en todo 2020 la pérdida de esos ingresos.
Ahora bien, con el visto bueno del Consejo Federal para volver a jugar, desde la LMF se elevaron protocolos a las autoridades de la Provincia de Buenos Aires con el fin de poder habilitar el ingreso de hasta 100 personas en cada partido del fútbol infantil.
En realidad la gestión se inició el 6 de enero en primera instancia ante la Municipalidad de General Pueyrredon, quien necesariamente tuvo que elevar la solicitud a Provincia.
Sin embargo, el martes las ligas se toparon con la negativa de la Aprevide, la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte que depende del gobierno provincial.
«Todo evento deportivo deberá celebrarse a puertas cerradas (sin público) hasta nuevo aviso», aclara en uno de sus párrafos la nota enviada al Consejo Federal desde la Aprevide.
«Sin público es inviable» aseguran desde los clubes ante la consulta de poder retomar la Liga tras el visto bueno del Consejo Federal.
En busca de definiciones
La situación es distinta en otras provincias. Mendoza, La Pampa y Jujuy habilitaron la presencia -con capacidad reducida- de público en los eventos deportivos. Córdoba y Santa Fe irían por el mismo camino en los próximos días.
La Liga Marplatense de Fútbol no es una más. Por la cantidad de futbolistas federados, por la organización de sus torneos, está considerada entre las más importantes del país, al nivel de la rosarina, la salteña, la cordobesa o la mendocina.
De todos modos los representantes de las ligas bonaerenses no se quedaron de brazos cruzados. Desde varias ligas bonaenses (Mar del Plata, Junín, Olavarría, entre otras) se iniciaron gestiones con la Aprevide para intentar llegar a un acuerdo.
Y en ese sentido desde la Agencia se envió una nota con un protocolo adecuado para poder comenzar con la actividad. La notificación incluye la presencia de hasta 45 personas por plantel (incluyendo jugadores, cuerpo técnico, auxiliares y alcanza pelotas) y otras 30 personas que acrediten ser socios o miembros activos del club. Serían unas 150 personas por partido.
Según trascendió, esas normas habrían sido muy bien aceptadas en el ámbito de la Liga Marplatense, que ve así una puerta como para solucionar el asunto y, al menos, con capacidad restringida e ingresos acotados, poder poner fin al largo parate y, de una vez por todas retomar la actividad.
Por eso, la LMF y la Aprevide articulan trabajando en esa dirección. Si prosperan esas gestiones y se optimizan los protocolos, la idea en Mar del Plata sería arrancar con la tradicional Copa Challenger, un torneo preparatorio que se disputa cada año antes del inicio de la Liga. Hay quienes, optimistas, se animan a aventurar que quizás antes de fin de mes la pelota podría estar rodando al menos para los más chicos. Siempre teniendo en cuenta la salvedad que significa la situación epidemiológica del país claro. Un ritmo que ya hace casi un año marca la pandemia.
En las últimas horas desde Aprevide se abrió una puerta. Se mantiene el «no» para el ingreso de público. Pero la posibilidad de los 30 socios por club podría ser un puntapié como para empezar a encontrar una salida. Al menos los dirigentes lo ven como una luz al final del túnel.