En medio de voces a favor y en contra, el Concejo Deliberante aprobó una ordenanza que propone horarios y lugares específicos para ejercer la prostitución en la vía pública. Si hay incumplimientos, se prevén multas y arrestos para las trabajadoras sexuales. 

Por Nicolás Quintaié

Luego de más de un año de debate, el Concejo Deliberante aprobó una ordenanza que busca regular la oferta y demanda de sexo en la vía pública que se desarrolla en la Zona Roja , en medio voces a favor y en contra.

Se trata de un tema en el que hay diversos intereses en juego. Por un lado, los planteos de vecinos por la «inseguridad y el narcomenudeo»; por el otro, los reclamos por mejores condiciones laborales y derechos de parte de las trabajadoras sexuales.

En votación dividida durante la última sesión-el interbloque de Juntos por el Cambio y el edil Nicolás Lauría se pronunciaron a favor, mientras que Acción Marplatense y el Frente de Todos no acompañaron-, el HCD le dio el visto bueno a la propuesta del gobierno municipal que establece que la prostitución en la vía pública solo podrá llevarse a cabo en «lugares y horarios específicamente habilitados”, con la prohibición de hacerlo en sitios “donde hubiere vecinos frentistas con residencia domiciliaria”. De lo contrario, se prevén multas y sanciones como arrestos de 5 a 30 días a quienes lo incumplan.

El Ejecutivo tiene un plazo de 45 días desde la sanción de la ordenanza para determinar el o los lugares donde se trasladará la Zona Roja, que hasta el momento se encuentra dividida en distintos barrios de la ciudad como la Vieja Terminal, La Perla, Sarmiento, Don Bosco y Los Andes. Además, la normativa obliga a garantizar condiciones de seguridad y salubridad en los sitios habilitados para ejercer la prostitución.

Voces a favor y en contra

“Esto le da más herramientas a la Justicia y a la policía para que puedan actuar. Para mantener el orden y cuidar a los vecinos de la Zona Roja actual, que no merecían vivir como estaban viviendo”, sostuvo Montenegro tras la sanción de la ordenanza.

En la misma línea se expresaron sectores vecinales. “Fueron más de dos décadas de espera. Nos hemos visto vulnerados en todos nuestros derechos, siendo víctimas directas estos últimos años de amenazas y violencia física por parte de un colectivo que pretende ampararse en una falsa victimización para delinquir y vandalizar libremente”, celebró a través de un comunicado la Comisión Vecinal de los barrios Don Bosco, Sarmiento y Los Andes.

“Propusimos abordar la problemática en forma integral, reconociendo el padecimiento estructural de toda la población travesti-trans. El Ejecutivo no realizó ningún diagnóstico, ni ningún tipo de política de inclusión, de reconocimiento, de entendimiento de cuál es la situación en la que se encuentra cada persona que ejerce la prostitución en la vía pública», cuestionó, en contrapartida, la concejala Sol de la Torre (Frente de Todos) durante el debate legislativo.

El Movimiento de Mujeres y Diversidad de Mar del Plata también lanzó duras críticas. La organización solicitó vetar la ordenanza porque “criminaliza a las personas en situación de prostitución”. Y planteó que el traslado de la Zona Roja representa un criterio “de exclusión” que condena a las trabajadoras “a más violencia y marginalidad”.

“La respuesta estatal a las exigencias ciudadanas deben tener como base garantizar derechos y nunca penalizar la pobreza”, señalaron desde el sector, además de exigir el cumplimiento de la ordenanza 23.237: la misma establece un cupo laboral no inferior al 1% en el sector público para personas travestis, transexuales y transgénero “que reúnan los requisitos de idoneidad para el cargo”.

Adónde se trasladará la Zona Roja

Tal como estipula la ordenanza, el gobierno cuenta ahora con algo más de un mes para definir a qué lugar se trasladará la Zona Roja, con varias opiniones y posibilidades en carpeta. Desde la Red por el Reconocimiento del Trabajo Sexual ponderaron que el municipio haya reconocido la actividad porque se puso el tema en agenda; aunque remarcaron que no se le puede dar “más poder punitivo” a la policía, estandarte de la violencia institucional contra el colectivo.

De todos modos, la organización propuso dos opciones para el traslado, las cuales cumplirían con la condición de que no haya vecinos frentistas. Una es la avenida Luro, desde Chile hasta Tierra del Fuego. La otra, la Avenida Champagnat, donde hay pocas viviendas. Por su parte, el Colectivo Disidente eligió la avenida Antártida, cerca del Cementerio Parque, como alternativa.

Según pudo averiguar Bacap, la intención del Ejecutivo es mantener reuniones durante las próximas semanas con las organizaciones que nuclean a las cerca de 120 trabajadoras sexuales que se desempeñan en la Zona Roja para acordar el o los lugares de traslado. Los encuentros serán coordinados por la Subsecretaría de Derechos Humanos, con la participación del área de Seguridad: la autoridad de aplicación de la ordenanza.