En el marco de su presentación en Mar del Plata, dialogamos con el líder de la banda oriunda de Boedo, que viene de realizar una gira por Europa.

 

Tras su gira por Europa, Bestia Bebé llega al Club Tri de Mar del Plata para presentar su último material discográfico y parte de su carrera.

En cada uno de sus recitales, la banda oriunda de Boedo sumerge a su público en su versión más acelerada y trash metalera. Dicen las buenas lenguas que son la banda argentina con más pogos en la escena independiente y eso se comprobará este sábado 9 de marzo. En la previa del show en Club Tri, Bacap dialogó con el líder de la banda, Tom Quintans.

Giras y discos

-¿Cómo estuvo la gira por España?

-Fue la cuarta vez que fuimos y fue la mejor de todas. La verdad, la pasamos espectacular. La gente muy buena onda y copada como siempre y, en cuanto a cantidad de gente que fue, también fue mejor que las otras. Agotamos un show en Madrid e hicimos otro más. En Barcelona también nos fue muy bien.

Fue la primera gira que hicimos con Primavera Labels, el sello que nos editó nuestro último disco en vinilo. 

-¿Cuál fue la búsqueda creativa o cambio que hiciste en la composición de los temas de “Vamos a destruir” en comparación a los discos anteriores?

-La diferencia de este disco con los anteriores es que no lo pensé tanto. Hice temas según el estilo que iban saliendo. No tratar de encausar para algún lado, sino dejar que la canción fuera para donde pintara.

No tener una premisa fue lo que los diferencia de los otros, también la composición o los arreglos de las canciones. A la hora de grabarlo nos dimos cuenta de que esta premisa, sin pensarla, generó que hubiera canciones con estilos bastante diferentes y a la hora de grabarlos quisimos meterle una especie de sello que identificara al disco y buscamos algo con las guitarras, arreglos medio metaleros. Los que pudimos meterlos quedaban buenos y otros los dejamos como estaban, pero la idea era buscar un hilo conductor y fue por el lado de las guitarras.

Amistad, divino tesoro

-Con más de 10 años de carrera, ¿qué valores sentís que son los que más los une como banda?

-Lo que más valoro después de diez años es la amistad que nos une. Además de compartir la banda, compartimos un montón de otras cosas, formamos parte de un mismo grupo de amigos y eso está buenísimo. 

Ir de gira, hacer todo y ser amigos hace que todo sea más llevadero. Grabar, girar… Tener una banda no es solo diversión constantemente, más una banda autogestionada que tenés que hacer de todo. Entonces, llevarse bien y estar todos tirando para el mismo lado es fundamental. Así que es lo que más valoro y me gustaría que nunca se pierda.

-Hablando de autogestión, ¿cómo ves esta crisis en el ambiente cultural y cómo sentís que repercute en ustedes y la música en general?

-La principal repercusión de la crisis es que a la gente no le alcanza la plata y, si no te alcanza la plata para comer o pagar necesidades básicas, se empieza a recortar los gustos, ya sea los recitales, lo que sea. Creo que nos va a repercutir, ahora es temprano, está recién empezando el año, pero creo que va a pegar, esperemos que no mucho. La venta de entradas, que baje la cantidad de shows, que sea más difícil tocar en el interior por los gastos. Ojalá que me equivoque.

Gustos y pasiones

-¿Cómo convive tu carrera como solista junto con Bestia Bebé? ¿Cómo surge el proceso de escritura para ambos proyectos que son disímiles?

-No lo considero como una carrera solista. Como me gusta tanto tocar es algo más que hago a todo mi universo musical. Surgió en la pandemia tratando de hacer versiones de los ´50 y ´60 yankees, traduciéndolos al español y luego compuse algunos temas míos en ese estilo. Y las fechas luego fueron saliendo. Cuando no tengo fechas con Bestia Bebé intento meter algunas. Es mucho más relajado, en los huecos que tengo, si sale alguna fecha para tocar solo, está buenísimo.

-Una vez dijiste que Iorio era tu ídolo, ¿seguís conservando esa visión? 

-Ricardo fue siempre mi ídolo porque, además, de chico Almafuerte y Hermética fueron las primeras bandas que escuché. Lo que más me gusta de él, obviamente su música, sus letras, su forma de escribir me identifica, que era diferente a los demás, siempre decía lo que pensaba y se diferenciaba del rock nacional clásico.  Era un verdadero punk, se diferenciaba de todo. Primero que nada, su música y sus letras.

-¿Solo el rock and roll pasó de moda o sentís que también a otro género le pasó lo mismo?

-Creo que un montón de géneros pasaron de moda: el jazz, el blues y tantos otros. Que hayan pasado de moda es algo bueno porque solo quedan a los que les gusta de verdad, a los que les gusta hacerlo de verdad y eso la gente lo reconoce. Muchos se ofenden cuando digo que el rock and roll pasó de moda porque creen que estoy diciendo que murió y es todo lo contrario: está más vivo que nunca, solo que no es la moda del momento, no es lo que te venden los grandes medios y creo que va a pasar con otros géneros porque así funciona.