Desde Bacap charlamos con Sandra Mihanovich, su experiencia arriba del escenario, motivaciones, descripciones y futuro. También profundizamos sobre su vida y un consejo hacia los más jóvenes.
Por Ian Punter
La cantautora Sandra Mihanovich el próximo 27 de septiembre se estará presentando en el Teatro Roxy con su gira “Poner el cuerpo”, con invitadas locales como Cecilia Pugliese y Florencia Cosentino.
– Ha sido un año de grandes aniversarios ¿Cómo has vivido este año de celebraciones? ¿Y qué significa para vos poder compartirlo con el público?
– Bueno, lo vivo con muchísima alegría, con mucha emoción, con la felicidad del tiempo compartido y la felicidad de seguir estando. Creo que cuando pasa el tiempo, uno va tomando conciencia de que no es fácil, de que no es algo que cae de maduro. Entonces, uno ha ido construyendo a lo largo de los años un vínculo muy lindo con la música y con la gente que ha ido eligiendo las canciones.
Es un año de celebraciones, es un año de «poner el cuerpo». Siempre ha sido un año de poner el cuerpo. Yo he transitado la vida poniendo el cuerpo, pero en este caso, he querido hacer hincapié en eso porque me parece que, a partir de la pandemia y de un montón de situaciones, tomamos conciencia de la importancia de estar con el otro, para tomar posesión de nuestra vida, digamos.
– Con 22 discos publicados a lo largo de tu carrera, ¿cuál crees que fue el mayor desafío creativo que enfrentaste a lo largo de estos años?
– No tengo la menor idea de cuál fue el mayor desafío. El desafío, yo creo que es cotidiano, es permanente. El desafío es ser consecuente con uno mismo, decir lo que uno piensa, plasmarlo, concretarlo, elegir las canciones que vayan diciendo eso que uno tiene ganas de decir.
El desafío es, más que nada, mantener una actitud humilde, de trabajo, de búsqueda, y un enorme agradecimiento a cada situación que a uno le toca vivir, partiendo de la base de que tenemos el privilegio de hacer lo que nos gusta, la bendición de tener una vocación y la posibilidad de plasmar y concretarla.
-El repetirse es algo en lo que pienso frecuentemente. Uno piensa en el concepto de un disco, de dos, tres, cuatro, pero ya cuando llegas al décimo ¿cómo haces para no repetirte?
– Es que siempre hay canciones nuevas, siempre hay momentos nuevos. Hay canciones nuevas que hablan de otras cosas, aunque hablen de lo mismo, hablan desde otro lugar.
Yo creo que es interesante tener una coherencia y tener una personalidad o un estilo propio. Eso no es repetirse, eso es ser quien uno es. Y después, bueno, ir acompañando las canciones con las cosas que uno va sintiendo. Viste que un día tenés ganas de ponerte una camisa roja, y al otro día te querés poner una verde, y de repente a la otra semana no te gusta ni la roja ni la verde, querés ir toda de negro.
Y eso, yo creo, es escucharse a uno mismo. Escuchar lo que uno siente y quiere. Entonces, aparecen cosas diferentes, porque somos seres muy cambiantes. Mientras guardemos un hilo con nuestra identidad, valen los cambios.
-En esta gira invitaste a artistas locales como Cecilia Pugliese y Florencia Cosentino. ¿Qué te motivó a abrir el espacio para estas colaboraciones?
– Me parece muy lindo encontrarse, me parece muy lindo que la música nos permita conocernos, reconocernos, encontrarnos. Me parece que voy a ser una visitante en Mar del Plata, una ciudad que amo y que me genera mucha felicidad. Entonces, me encanta haber invitado a dos artistas locales que van a ser mis anfitrionas, en definitiva, porque son ellas las que me dan el espacio para poder compartir mis canciones, mi música.
Y entonces, bueno, darme un abrazo con las chicas, conocer su manera de ser, de cantar. Me parece algo súper enriquecedor y lindísimo para mí, y creo que ellas también lo van a disfrutar un montón.
-¿Qué puede esperar el público marplatense de tu espectáculo?
– El público marplatense es muy melómano, le gusta mucho la música. A lo largo de todos estos años, que he cantado un montón de veces en distintos ámbitos, siempre la respuesta ha sido de mucho compartir, de mucho cantar, de mucha participación. También de mucho silencio respetuoso.
El público marplatense la tiene clara, y me encanta ir en invierno. Bueno, ahora voy a llegar en primavera, tal vez la estación más linda de todas, pero me encanta ir fuera de temporada, cuando los marplatenses, que en época de vacaciones están trabajando como locos, pueden darse el gusto y decir: «Bueno, me hago una escapada, me voy al Roxy a ver a Sandra y después sigo laburando».
-¿Qué es lo que más disfrutas de actuar en vivo?
– Todo: la emoción, la música, escuchar mi banda, la suma de la música, de las voces, el intercambio con la gente, esa energía que va y viene.
Es siempre una adrenalina diferente. Siempre quiero cantar. O sea, yo voy a un programa de televisión y canto, llevo la guitarra. Yo voy a cualquier sitio donde vaya, estoy cantando, porque me hace muy feliz cantar. Así que, partiendo de la base de la felicidad que siento al cantar, todo lo demás me llena de alegría también.
-¿Qué sentís que aprendiste sobre vos misma a lo largo de tu carrera musical, tanto como artista como persona?
–Bueno, fui adquiriendo seguridad. Yo, como en general todos los adolescentes lo son, era un cúmulo de inseguridad, de miedos, de cosas que aprendemos a superar día a día.
Fui reconociendo mi posibilidad de cantar, la maravillosa herramienta que tengo en la voz, que me permite expresarme y comunicarme. Fui aprendiendo que soy bastante terca y que tengo que tener cuidado con mi terquedad, pero también soy bastante perseverante y laburante.
Uno va reconociendo sus puntos flojos y sus puntos más fuertes. Entonces, trata de hacer pie en los puntos fuertes y de no tropezar con esas partes de uno que no son tan buenas.
-¿Cómo ves el futuro de la música argentina? ¿Y qué consejo le darías a las nuevas generaciones de músicos?
– Yo creo que Argentina es un lugar lleno de música en todas partes. Yo tengo un programa en Radio Nacional que va los sábados de 13 a 15, y que la verdad es que me ha permitido conocer a músicos de todo el país: músicos, músicas, cantores, cantoras, cantautores.
Está lleno de música, música de todos los géneros, música que tiene que ver con la geografía de cada sitio de nuestro país. La verdad es que es inconmensurable la calidad y el talento que hay en todas partes. Así que, para mí, es una felicidad descubrirlo, tener esta posibilidad de compartirlo desde mi programa de Radio Nacional.
Les diría a las nuevas generaciones que le metan pata, que hagan lo que les gusta, que no traten de copiar a nadie, que no traten de cantar como alguien o de componer como alguien. Lo más interesante que van a tener siempre es su personalidad y su manera de hacer las cosas.