La pérdida progresiva de visión, la dificultad para ver con nitidez o el deslumbramiento al conducir de noche pueden parecer señales menores, pero muchas veces esconden una causa frecuente: las cataratas. Esta afección ocular relacionada con el envejecimiento afecta a millones de personas en todo el mundo, y su tratamiento ha evolucionado notablemente en los últimos años, mejorando no solo la calidad visual sino también la calidad de vida.
Detectarlas a tiempo es clave. “Comienza con disminución en la agudeza visual y, a medida que va aumentando, aparece la visión borrosa, alteración en la percepción de colores, deslumbramiento. Cuando aparecen estos síntomas es momento de consultar al oftalmólogo”, explica el Dr. Alejandro Bezzato, médico especialista en cirugía ocular.
En Mar del Plata, el Centro Oftalmológico Mar del Plata (COMDP) —dirigido por el Dr. Rubén A. Bezzato— se ha consolidado como un espacio de referencia para el diagnóstico y tratamiento de las cataratas. Allí, profesionales como el Dr. Alejandro Bezzato combinan atención personalizada con tecnología de última generación, ofreciendo soluciones adaptadas a cada paciente.
Grandes avances
“La cirugía de cataratas ha avanzado muchísimo. Antes, se realizaban incisiones mucho más grandes, el paciente debía quedarse internado y se utilizaban lentes rígidos que no se adaptaban bien al ojo. Además, se necesitaban puntos y la recuperación era mucho más lenta. Hoy en día es un procedimiento rápido, seguro y altamente eficaz. Usamos tecnología de punta, como el facoemulsificador, que permite extraer la catarata a través de microincisiones, sin necesidad de suturas. Contamos con sistemas de guía asistida por computadora y lentes intraoculares de última generación, que no solo mejoran la visión, sino también la calidad de vida del paciente”, detalla el especialista.
El procedimiento incluye la colocación de lentes intraoculares, y existen distintas opciones según las necesidades visuales de cada persona. “Desde los monofocales, que corrigen la visión de lejos, hasta los multifocales o tóricos, que permiten ver a diferentes distancias o corrigen el astigmatismo. La elección depende de muchos factores: el estilo de vida del paciente, edad, sus necesidades visuales y su salud ocular general. Por eso, la selección del lente es personalizada y la hacemos juntos, en la consulta.”
La recuperación
La recuperación, por su parte, suele ser rápida y sencilla. “Indicamos el uso de gotas, evitar frotarse los ojos y no hacer esfuerzos físicos durante unos días. En general, la mejora visual se nota en las primeras 24 a 48 horas, aunque puede seguir mejorando durante las semanas siguientes. A los pocos días, la mayoría ya retoma su rutina habitual.”
Finalmente, aunque no se pueden prevenir por completo, sí se puede retrasar la aparición de cataratas. “Están asociadas al envejecimiento natural del ojo, pero llevar una vida saludable puede ayudar: usar anteojos de sol, evitar el tabaquismo, mantener una alimentación rica en antioxidantes y controlar enfermedades como la diabetes. También es clave hacer controles oftalmológicos periódicos para detectar cualquier cambio a tiempo.”