Elaborado por Destilería Kalmar junto a AWC, el single malt inspirado en Mar del Plata y Tierra del Fuego se alzó con una medalla de bronce en uno de los certámenes más importantes del mundo. Bacap dialogó con Pablo Apodaca, maestro destilador del proyecto.
La escena del whisky argentino suma un nuevo hito. Land of Fire, el single malt artesanal gestado entre las brisas del Atlántico y los vientos australes, fue distinguido con una medalla de bronce en el London Spirits Competition 2025, un certamen que reúne a expertos de más de 30 países y que destaca la calidad, el precio y el packaging de los mejores destilados del mundo.
Elaborado por Destilería Kalmar en alianza con el grupo inversor AWC, Land of Fire se inspira en los paisajes extremos y simbólicos de Ushuaia y Mar del Plata, dos puntos cardinales de la identidad argentina. Bacap dialogó con Pablo Apodaca, maestro destilador y uno de los impulsores del proyecto, quien explicó con entusiasmo que este reconocimiento “es apenas el primer resultado de un proceso que todavía está en evolución, y cuyo potencial es enorme”.
“Desde el principio, quisimos hacer un whisky con identidad local, que hablara de nuestros paisajes y saberes. la creación comenzó en Mar del Plata, donde hicimos investigación, desarrollo y producción piloto, y desde donde perfilamos el carácter inicial del espíritu”, contó Apodaca.
Un whisky argentino
La apuesta del equipo fue clara: no imitar modelos foráneos sino construir un whisky argentino desde la raíz. Para ello, cuidaron cada etapa del proceso, desde la selección de cebadas malteadas, la maceración, la fermentación controlada con levaduras seleccionadas y una primera destilación meticulosa, que sentó las bases del perfil sensorial que hoy empieza a ser reconocido internacionalmente.
Una de las decisiones más audaces del proyecto es su “finishing” —la etapa final de añejamiento— en barricas de lenga fueguina (Nothofagus), una madera nativa de la Patagonia. Esta elección no solo aporta un carácter distintivo al destilado, sino que representa un verdadero gesto de innovación. “Hemos trabajado arduamente para lograr que esta madera imprima notas únicas y armónicas. Fue una etapa intensa de investigación, probando maltas, levaduras y técnicas para encontrar la combinación ideal”, detalló Apodaca.


Aunque el proceso continúa —y las próximas etapas se trasladarán en parte a Tierra del Fuego, sin perder el anclaje marplatense—, este reconocimiento en Londres es un espaldarazo para un proyecto que aún no salió al mercado. La estimación de venta apunta a mediados de 2026, siempre en función de la evolución del añejamiento y la maduración deseada.
“El Reino Unido premió esta primera versión, pero creemos que con el tiempo, el whisky va a lograr todavía mejores resultados. estamos frente a un producto con muchísimo futuro”, concluyó el maestro destilador.
Con este galardón, Land of Fire se convierte en un embajador del talento, la experimentación y el orgullo territorial de una nueva generación de destiladores argentinos. Mar del Plata suma así un nuevo motivo de brindis.