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abril 26, 2024
Juegos Paralímpicos Tokio 2020
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Los Juegos Paralímpicos mantienen encendida la llama en Tokio

Mar del Plata tendrá dos representantes en los Juegos que comenzarán el 24 de agosto. Mauricio Ibarbure disputará sus sextos Paralímpicos en boccia mientras que para el nadador Matías De Andrade, la capital japonesa significará su tercera experiencia.

por Víctor Molinero

Finalizados recientemente los Juegos Olímpicos Tokio 2020, la capital japonesa tiene todo listo ahora para albergar del martes 24 de agosto al domingo 5 de septiembre a los Juegos Paralímpicos

Tal como sucedió con la cita que acaba de finalizar, Mar del Plata también estará representada dentro de la delegación argentina. Así como en los JJOO fueron como embajadores de la ciudad los basquetbolistas Luca Vildoza y Patricio Garino, el tenista Horacio Zeballos, la atleta Belén Casetta y el surfista Lele Usuna, los Paralímpicos tendrán esta vez a dos representantes de la ciudad compitiendo en Tokio.

Ellos son el nadador Matías De Andrade y Mauricio Ibarbure, el integrante de la Selección Argentina de boccia que tomará parte de sus sextos Juegos Paralímpicos consecutivos, tras su estreno en Syndey 2000.

«Coqui» Ibarbure estará acompañado por otros tres marplatenses, su asistente Agustín Molpeceres, el entrenador Pablo Iocca y el jefe de equipo, Cristian Rosado. 

Ibarbure, que quedó al borde del podio en Río de Janeiro 2016, donde su aporte fue clave para el cuarto puesto del equipo BC1/2, se concentrará junto a toda la selección de boccia en una burbuja en Cenard. Por disposición de los organizadores de Tokio 2020, cada grupo tiene que instalarse en la Villa Olímpica siete días antes del arranque de su competencia y debe irse entre 48 y 72 horas después de finalizada su participación.

La competencia de boccia comenzará en la noche argentina del viernes 27 (mañana japonesa del sábado 28) y finalizará el 4 de septiembre.

«Coqui es un animal. Es muy funcional para el equipo», asegura Cristian Rosado, quien ya acompañó a Ibarbure en tres Juegos Paralímpicos (Sydney 2000, Beijing 2008 y Londres 2012) en distintas funciones y ahora lo hará como jefe de equipo del seleccionado de boccia.

«La pandemia nos complicó bastante porque acá tuvimos muchas limitaciones. Cuando muchos de los atletas entrenaban en otros países acá estábamos guardados. Hay que tener en cuenta que la cancha mide 12,5 metros de largo por 6 de ancho y entrenar en el living de tu casa no es lo mismo», lamenta. «En todo Sudamérica se hizo complicado. En Brasil quisieron organizar un par de torneos pero justo subieron los casos y no se pudieron hacer. En Europa en cambio hacían campus donde reunían a dos o tres países para tener competencia. Nosotros llegamos sin competir desde 2019 pero tratamos de suplirlo con mucho trabajo y haciendo amistosos entre nosotros», aclara Rosado.

«Nosotros fuimos los que más tardamos en volver. Boccia fue la última disciplina habilitada en esta pandemia porque nuestros deportistas son generalmente del grupo de riesgo y los que más cuidados requieren», agrega.

«Igual vamos con muchas expectativas. Estamos esperanzados en repetir lo que se hizo en Río de Janeiro», avisa el jefe de equipo, que además es entrenador de la entrerriana Stefanía Ferrando, quien en Tokio tomará parte del torneo individual para la categoría BC3.

Con 40 años, Ibarbure afrontará su sexto Juego Paralímpico pero nadie en su entorno tiene claro si será el último.

«Nosotros en joda le decimos que es su último Paralímpico y él también por ahí lo menciona. ¿Pero sabés que pasa? Coqui no afloja nunca, sigue entrenando como el primer día así que con él nunca se sabe si Tokio va a ser su último Juego.

Ibarbure quiere sumar en Japón su primera medalla paralímpica. Es la única que le falta ya que ha hecho podio en Copa América, Panamericamos, Open Mundiales y torneos regionales. En Río de Janeiro, con el cuarto puesto en la competencia por equipos, ya tuvo su diploma olímpico. Pero ahora va por más.

De Andrade, por la medalla que le falta

Matías De Andrade fue el primer representante de la ciudad que se aseguró un lugar en Tokio 2020. Lo hizo gracias a su tercer puesto en los 100 metros espalda de la categoría S6, durante el Mundial disputado en Londres. Nacido en Avellaneda hace 28 años, Matías vivió también en Córdoba y Miramar junto a su familia y desde hace 10 se radicó en Mar del Plata. Aquí entrena junto a Ezequiel Valdez y Federico Diez Andersen en Once Unidos.

«De lunes a sábados hacemos sesiones de dos horas de agua y los martes y jueves metemos doble turno. Además otros tres días por semana hacemos una hora de gimnasio», cuenta De Andrade en diálogo con Bacap, en los últimos días de su preparación antes de partir hacia Buenos Aires para hacer escala previa al viaje a Tokio.

Para Matías, los de Tokio serán sus terceros Juegos Paralímpicos, luego de lo que fueron sus experiencias en Londres (noveno) y Río de Janeiro (quinto y con diploma olímpico). Y hacia Japón irá (en compañía de Valdez) en busca de la única medalla que le falta.

«Ya tengo medallas en mundiales y en Parapanamericanos así que me falta solo la paralímpica», resumió.

Hijo de un excombatiente de Malvinas y el mayor de cuatro hermanos, De Andrade ostenta hoy por hoy la segunda mejor marca entre los nadadores que competirán en Tokio. Sin embargo, más allá de la confianza en sus posibilidades, Matías entiende que hacer pronósticos sería muy arriesgado.

«Uno nunca puede predecir una medalla porque no sabés con qué te vas a encontrar. Suele haber sorpresas para estos torneos. Hay rivales que por ahí estuvieron inactivos durante un tiempo y vuelven para los Juegos. Por ejemplo en Alemania apareció ahora uno que tiene el récord del mundo y no nadaba desde Río 2016», advierte.

Juegos Paralímpicos Tokio 2020
Matías De Andrade va por la medalla paralímpica. La única que le falta tras las conseguidas en mundiales y parapanamericanos.

«Además, con esto de la pandemia, nosotros tuvimos menos competencias que los europeos. Se nos suspendieron cuatro torneos internacionales durante el último año y medio. Cuando se declaró la pandemia estábamos en Italia para un torneo y se suspendió. Fueron dos días de viaje para nada», lamentó.

«Igual sabemos que las posibilidades de medalla están. Nos está yendo muy bien así que vamos por una buena marca», aclara quien fuera campeón Parapanamericano en Lima 2019.

En su última aparición prepandemia, un par de meses atrás en un Open en Alemania, Matías fue segundo en su categoría y quinto en la general (se torneos multicategoría). «Le gané al último campeón mundial en ese Open», aclara sobre una competencia en la que estuvieron los mejores del mundo, rivales con los que volverá a encontrarse en Japón.

En Tokio competirá en los 100 metros espalda, que es su especialidad, pero también se anotó para los 50 metros mariposa.

«Mi carrera es los 100 espalda pero me inscribí en 50 mariposa, que es unos días antes, para evitar sorpresas, conocer cómo se maneja todo en el torneo y demás», advierte.

La natación tendrá medallas prácticamente todos los días, desde el miércoles 25 hasta el viernes 3 de septiembre. Matías entrará al agua para su primera prueba el 30 de agosto y el 3 de septiembre irá en busca de una medalla en los 100 metros espalda.

Matías tiene doble beca (de la Secretaría de Deportes de la Nación y del Enard) y con ello trata de focalizarse en la natación aunque entiende que una medalla paralímpica le permitiría mejorar sus condiciones en la preparación.

«Una medalla paralímpica me permitiría elegir un entrenador y que el Estado se haga cargo del costo de sus viajes y de una beca para él. Así me podría acompañar a todos los torneos internacionales», se entusiasma. «Después de los Juegos de Río bajó el presupuesto para el deporte en el país. En 2017 comenzó a verse un declive importante y luego de los Juegos de Lima fue peor. Esperemos que cambie eso», agrega.

«Estos Juegos son especiales y más para Latinoamerica por el esfuerzo que hacen todos los deportistas. Mientras que en otras partes del mundo, con otros presupuestos, pudieron entrenar en mejores condiciones, acá todo fue muy difícil», argumenta. 

Los Juegos Paralímpicos en contexto

Los Juegos Paralímpicos Tokio 2020 tendrán competencias en 22 disciplinas deportivas. Habrá actividad en tiro con arco, atletismo, bádminton, básquetbol en silla de ruedas, boccia, canotaje, ciclismo, hipismo, esgrima en silla de ruedas, fútbol 5 para ciegos, golball, judo, pesas, remo, tiro, vóleibol sentado, natación, tenis de mesa, taekwondo, triatlón, rugby en silla de ruedas y tenis en silla de ruedas.

Argentina viajará con una delegación de 51 atletas.

Un poco de historia

Los Juegos Paralímpicos comenzaron a disputarse en 1960, con aquella primera edición en Roma. Desde entonces Argentina participó de todas las ediciones (15) y tiene un acumulado de 156 medallas, con 31 preseas doradas, 61 plateadas y 64 de bronce. Tel Aviv 1968 fue la de mayor conquista de oro con 10 medallas (más otras 10 de plata y 10 de bronce) pero justamente en la capital japonesa, en los Juegos Tokio 1964 fue donde más medallas se consiguieron con un total de 37 (6-15-16).

En la última edición, Río de Janeiro 2016, Argentina volvió a ganar una medalla de oro tras 20 años y finalizó con 5 preseas en total (1-1-3). Yanina Martínez obtuvo la medalla de oro tras ganar la final en los 100 metros llanos femeninos de la categoría T36.

En números

4.350 Los atletas que tomarán parte de Tokio 2020

200 Los países que participarán en estos Juegos.

272 Las pruebas masculinas 

227 Las pruebas femeninas

40 Las pruebas mixtas

22 Las disciplinas que estarán en competencia

15 Las ediciones previas que se realizaron de los Juegos Paralímpicos.

2 Los representantes marplatenses que competirán en estos Juegos.

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